En el pasado, ellos lo vivieron en carne propia. Carlos Ahumada, el promotor de los videoescándalos, era en 2004, el propietario del Santos Laguna y los entonces jugadores José Antonio Noriega y Joahan Rodríguez padecían las mismas penurias que hoy viven los Gallos Blancos del Querétaro con el dueño de Oceanografía, Amado Yáñez.
“El grupo estaba dividido, porque Ahumada nos adeudaba y hacía promesas de que si nos solidarizábamos con él y lo apoyábamos públicamente al mostrar una pancarta [en el estadio], nos iba a pagar”, revela El Tato Noriega, vía telefónica, luego de recordar aquel pasaje, cuando era futbolista.
“Había una parte del grupo que decía: ‘Pues sí, hagámoslo...’ Otros decían: ‘¡Cómo nos lo pide alguien que está en problemas con la justicia!’”, añade el analista de ESPN.
Han pasado 10 años de aquel suceso y ahora es Yáñez, empresario del Querétaro, el involucrado en líos con las autoridades. Y si nos vamos más atrás, Jorge Lankenau, con Rayados de Monterrey, experimentó un suceso idéntico, que también lo despojó de su club.
La repetición de estos casos hace reflexionar al también ex futbolista Joahan Rodríguez, compañero del Tanto en aquel Santos Laguna, de Ahumada Kurtz.
“Esto no se va a acabar. Sabemos que en México somos expertos para muchas cosas, para hacer malos manejos del futbol y muchas cosas que van a ir preocupando”, reprocha el más popular de los gemelos Rodríguez. “Es lamentable que estas cosas pasen. En México pasa de todo y es más lamentable que suceda en el futbol, es muy triste”.
Y añade que el problema es de fondo, ya que radica en la idiosincrasia de los dirigentes del futbol mexicano, pues cree que el dinero termina por “gustarles”, sin importar cómo obtenerlo.
“Sí, te digo, esto no se va terminar. La gente o algunas personas que vean al futbol como un negocio, que sí lo es, pero mal encaminado, esto no se puede ir haciendo. Mientras no haya un orden o una mano dura, no va a pasar nada”, lamenta Joahan. “A los directivos les gusta mucho el dinero, sea como sea. Entonces, mientras sigan pasando estas cosas, lo vamos a seguir aceptando, porque es dinero. Bien o mal, pero bienvenido el dinero”.
La posibilidad de que el futbolista termine “embarrado” por los problemas legales que pueda tener el propietario del equipo suele pasar por la mente de los jugadores.
Rodríguez, sin embargo, explica que “tienes que estar tranquilo, porque no estás involucrado a ese problema; tú juegas al futbol y ellos son los que administran y te pagan, no tiene nada que ver con el futbol. Yo creo que tienes que estar tranquilo y saber que tu nombre no puede terminar manchado”.
José Antonio Noriega es un poco más cauto en el tema de los personajes de dudosa reputación que ingresan como socios de la Federación Mexicana de Futbol.
Contrario a lo que cree Joahan Rodríguez, El Tato asegura que en el órgano rector del balompié nacional, cada vez se toman medidas más fuertes para definir quién es bienvenido y quién no, para convertirse en propietario de un club.
“En México, específicamente, hay bastante control. No se imaginaron que eran ese tipo de personas, aunque había el ejemplo de Carlos Ahumada y de Oceanografía”, lamenta el comentarista. “Pero el futbol mexicano es bastante sólido, con respecto de otras ligas en Latinoamérica. España sufre, de otra forma, por ejemplo: El presidente del Betis acaba de entrar a la cárcel y Uli Hoeness, presidente del Bayern Munich, admitió que evadió al fisco”.
En lo que coinciden Rodríguez y Noriega es que dentro del terreno de juego, actualmente los jugadores de los Gallos Blancos sí pueden estar afectados por la falta de pagos.
Mas los llaman a la tranquilidad, porque ambos ex futbolistas consideran que el problema legal de Amado Yáñez terminará y las familias que dependen de esa administración podrán volver a cobrar sus sueldos con normalidad.