LEÓN.— Serán los esmeraldas del León los que permitirán a Nery Castillo cumplir con uno de sus máximos anhelos dentro del futbol: disputar la Copa Libertadores.
Convertido en refuerzo del cuadro verde, luego de padecer una temporada sin pena ni gloria con los Tuzos del Pachuca, club con el que los guanajuatenses están emparentados, Nery es premiado inesperadamente, al aterrizar como refuerzo del León, conjunto que por méritos propios se agenció un boleto a la Libertadores, aunque por haber quedado tercero, tendrá que ganar previamente la fase inicial para aspirar a la etapa de grupos del certamen sudamericano.
“Con el León cumpliré mi sueño de jugar la Copa Libertadores”, compartió, orondo, el controvertido futbolista, quien trabajará con su segundo equipo en nuestro país tras su breve estancia con el Pachuca en el pasado Apertura 2012.
“En mi mente solamente está trabajar duro, clasificar a la [fase de grupos de la] Copa Libertadores y por qué no, pensar en ganarla. El León ha demostrado que tienen un gran grupo y yo como jugador trataré de acomodarme al grupo, con mucha humildad”, aseguró, al ser presentado como refuerzo por Jesús Martínez, presidente del equipo, en el estadio Nou Camp.
El León tuvo una destacada participación en el Apertura 2012, luego de su vertiginosa vuelta al máximo circuito. No sólo se olvidó del problema porcentual que enfrentan todos los “benjamines”, sino fue protagonista, clasificó a la Liguilla y fue eliminado en semifinales por el campeón Tijuana.
Castillo, un mexicano de ascendencia charrúa, llenó de elogios al director técnico uruguayo, Gustavo Matosas. “No pensé en ser refuerzo. Es un equipo que ha demostrado que tiene un buen entrenador y una directiva muy buena”, aplaudió, convencido de que a sus 28 años aún tiene mucho que dar.
