Sencillo, el paraguayo Osvaldo Martínez disfruta como ninguno el pasaje futbolístico que experimenta en el América, donde se ha ganado el respeto de sus compañeros emplumados.
“Estoy muy contento por la confianza que me ha dado el grupo desde que llegué. Me dan muchas ganas de seguir trabajando de la misma forma y en lo grupal, más que contento, porque todos estamos haciendo las cosas como se debe y no debemos bajar los brazos”, asegura el talentoso mediocampista amarillo.
Prueba de la camaradería, confianza y disposición del plantel es que todos los jugadores están dispuestos a contribuir y se solidarizan con el compañero. Sucede en el tema de los penaltis, donde al unísono, todos levantan la mano. “Gracias a Dios, creo que le toque a quien le toque, la confianza de los compañeros es al 100%. Me tocó el sábado en Tijuana y los compañeros me respaldaron dentro del campo, así como le tocó a Chucho contra Querétaro. Es bueno que todos quieran patear el penalti y no que se escondan”, aplaude el guaraní.
Aconseja Osvaldo prudente a mantener esa mística con “los pies en la tierra”, porque empezamos de una manera muy buena y hay que seguir así; sabemos que estamos en la sexta jornada, todavía no ganamos nada y el torneo aún es largo”.
Predica humildad entre los futbolistas amarillos y sin perder ese valor pide a los seguidores millonetas que no lo llamen por su diminutivo, como algunos estilan: “Me gusta más que me digan Osvaldo, no sólo de ahorita, sino de siempre. Prefiero Osvaldo a Osvaldito”, observa.
Y al igual que sus seguidores sueña con campeonar. “Sabemos que la gente está ilusionada y estoy de acuerdo, pero es muy pronto hablar del campeonato cuando estamos en la sexta fecha”.