GUADALAJARA.— Gallos Blancos está herido de muerte y esta tarde podría recibir el tiro de gracia y descender matemáticamente si La Franja no pierde en casa ante los Jaguares y si el Atlante saca los tres puntos del Omnilife ante un Guadalajara que se juega su pase a la Liguilla, por lo que tanto jugadores, cuerpo técnico como aficionados del Querétaro deberán estar muy pendientes.

Los Potros de Hierro llegan al duelo de la jornada 14 con seis derrotas de manera consecutiva en el Torneo Clausura 2013 y además con el peso moral de haber perdido el miércoles pasado la final de la Copa MX, frente a Cruz Azul.

Pese a todo, los Potros de Hierro tienen una motivación: salvarse del descenso. Con la derrota de Querétaro, la noche del viernes frente a Morelia, la escuadra azulgrana se encuentra a un triunfo de asegurar matemáticamente su permanencia y condenar a los Gallos Blancos, si esto se combina también con al menos un empate de La Franja horas antes. La victoria ante Guadalajara devolvería la calma al equipo de Cancún.

Pero enfrente el Rebaño Sagrado no tiene otro camino. Este domingo, ante los azulgrana es ganar o ganar. Ningún otro resultado le sirve, pues cin 16 unidades, la Liguilla comienza a alejarse.

Igual que el torneo pasado, Chivas llega a la recta final del Clausura 2013 sin margen de error. Le restan 12 puntos por disputar. Necesita la mayor cantidad posible para aspirar a meterse en la Liguilla.

“Estamos motivados porque aunque perdimos, no quedamos lejos de los puestos de Liguilla. Estamos a dos puntos de distancia (del octavo lugar) y con este partido, si se combinan otros resultados, podemos quedar dentro de la zona de calificación para no alejarnos”, explica Patricio Araujo, después del cierre de preparación en Verde Valle.

Así, Chivas se presenta en casa con el panorama perfectamente definido. Necesita los tres puntos, sí o sí para mantener al menos con respiración artificial a unos moribundos Gallos Blancos.

Google News

TEMAS RELACIONADOS