El contrato entre el gobierno federal y la NFL expira en 2018, por lo que el partido del domingo entre los Patriots y Raiders podría ser la tinta para extender la firma de la liga con nuestro país o incluso poner punto final a la relación sin que se lleve a cabo el juego del próximo año.
El grito homofóbico de ¡Eeeh, pu..! que en varias ocasiones se realizó el año pasado cuando los Raiders vencieron a los Texans, ensució la imagen de México con la NFL.
“Es importantísimo que no se repita [grito], salimos manchados con ese tema el año pasado y ojalá no se repita. Hubo una molestia, no está bien, es un grito ofensivo se diga lo que se diga, ojalá todos entendamos que no debe ser”, declaró Arturo Olivé, presidente de NFL en México.
El directivo señaló que por ahora no se encuentran en negociaciones ya que mucho se evaluará con el juego del domingo.
“Por ahora no hay nada, sabemos que aún falta un partido y con los resultados que entreguemos ojalá y nos permitan darle continuidad a este proyecto”.
En el partido de 2017, un rayo láser molestó al quarterback de Texans, Brock Osweiler. Una lluvia de aviones de papel, llenó la cancha del Azteca. Las dos manifestaciones de la afición, fueron ma vista por la oficina de NFL en Nueva York.
Sin embargo, la liga tiene la confianza en que mejorará el comportamiento de los poco más de 81 mil aficionados.
El jefe de gobierno de Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera dio ayer por la mañana el kick off a la semana de actividades que habrá alrededor del partido y esperan que la derrama económica supere los 45 millones de dólares de 2017.
El viernes se inaugurará el Fan Fest en el Zócalo donde se esperán 200 mil personas en el fin de semana.