Saint-Etienne.— La selección de Islandia avergonzó a la de Portugal, ante la que logró un empate histórico (1-1) en su primera comparecencia en un gran torneo, en el que, además, marcó su primer tanto; y Hungría venció el clásico europeo ante Austria (0-2) en la quinta jornada de la Eurocopa de Francia.
Nani adelantó en el 31' a la selección liderada por Cristiano Ronaldo y Birkir Bjarnason puso el 1-1 definitivo en el 50’ al aprovechar un error de la defensa lusa.
Semifinalista en tres de las últimas cuatro Eurocopas, Portugal disparó hasta 25 veces a la portería vikinga, diez de ellas entre los tres palos, pero le faltó precisión.
Portugal e Islandia quedaron así empatados con un punto en la segunda posición de Grupo F, comandado sorpresivamente por Hungría tras su triunfo de 1-0 sobre Austria.
El encuentro en Saint-Etienne respondió a los cánones que mandan en la Eurocopa de Francia: pocos goles y emoción hasta el último instante.
Parecía Islandia un buen rival para Portugal en el debut del grupo de Cristiano Ronaldo, quien igualó el récord de 127 presencias de Figo en la selección lusa. El combinado isleño, entrenado por el experimentado Lars Lagerback, disputó el primer partido de su historia en una Eurocopa y tiene un equipo sin el renombre de los Cristiano Ronaldo, Pepe o Nani.
La estrella de Portugal, Cristiano Ronaldo, no dejó de intentarlo hasta el último segundo, pero el delantero del Real Madrid tenía la pólvora mojada. Como toda su selección. Aunque fue Portugal quien mandó durante prácticamente todo el partido, la selección que primero se acercó al arco rival fue la islandesa, pero el gol no tardó en llegar. André Gomes recibió un pase entre líneas cerca de la línea de fondo y centró raso al primer palo, donde apareció Nani para enviar el balón a las redes y celebrar el gol número 600 en la historia del torneo.
El dominio de Portugal era abrumador. Al descanso llevaba ya 11 tiros —seis de ellos entre los tres palos—, cuatro córners y una posesión del 65 por ciento. Y la segunda mitad arrancó con otra ocasión para Cristiano Ronaldo, pero su disparo desde fuera del área se fue desviado.
Pero como en el futbol las estadísticas son simplemente eso, números, llegó el gol de una Islandia que jugó casi todo el partido con sus once futbolistas en campo propio.
Bjarnason aprovechó un error de la zaga lusa para recibir un centro libre de marca en el borde del área pequeña. El delantero del Basilea tuvo tiempo enganchar la pelota y fusilar a Rui Patricio para el 1-1. Agencias