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Las Vegas.- En uno de los últimos días de los más de 100 que pasó en el hospital antes de morir, José Sulaimán hizo llegar a la familia Santa Cruz una colección de diversas peleas de boxeo en distintas épocas recopiladas en discos compactos para que José Santa Cruz tuviera la oportunidad de seguir empapándose de pugilismo y así transmitirlo a su hijo Leo, campeón supergallo del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), y a quien entrena desde que tiene cinco años de edad.

El gesto de Sulaimán podría tomarse como uno más de los que tuvo a lo largo de los 38 años que estuvo como presidente del Consejo Mundial, pero no fue así.

En agosto de 2013, cuando Leo se coronó al derrotar a Víctor ‘Vikingo’ Terrazas, don José Sulaimán se enteró de que el padre del nuevo campeón de su organismo era autodidacta en este deporte , y que a pesar de nunca haber practicado boxeo había conseguido que sus cuatro hijos practicaran bajo sus órdenes el pugilismo, sólo con el conocimiento que le dio ser un ferviente seguidor del deporte de los puños por medio de la televisión. Más adelante vendría el regalo de don José.

A un año de la muerte de Sulaimán Chagnón, la familia del ‘Terremoto’ Santa Cruz recuerda la buena voluntad que tuvo el mandatario del máximo organismo rector del boxeo.

“Don José, mediante su hijo Mauricio nos regaló una colección de muchas peleas de boxeo para que yo pudiera seguir viendo y aprendiendo. Incluye peleas de todas las épocas. Yo así aprendí, sólo mirando por la televisión los combates de Julio César Chávez, de Ricardo ‘Finito’ López, de Guadalupe Pintor, de Humberto ‘Chiquita’ González e infinidad de buenos boxeadores que ha tenido México.

“El se enteró de que yo enseñé a Leo y a sus hermanos sólo con lo que vi. Nunca peleé, pero hasta ahora nunca me han puesto una mano encima”, sostuvo en término simpático el padre de Leo.

Además de los discos compactos, Sulaimán también envió a la familia monedas de plata grabadas con la cara del ‘Terremoto’, como una especie de aliciente para que Leo continuara su camino como pugilista y en el cual marcha invicto en el terreno profesional.

José Santa Cruz es un hombre de campo que nació en Los Cerrillos, pueblo perteneciente al municipio de Huetamo, Michoacán y como tal no teme decir las cosas como las piensa, por lo que descarta, por ahora, que su hijo vaya a combatir con el cubano Guillermo Rigondeaux, a quien considera un peleador ‘cochino’.

“El que no quiere que se dé esa pelea contra Rigondeaux soy yo. Él nos ha faltado al respeto, nos ha insultado tratando de provocarnos para aceptar la pelea, pero no lo haremos. No tiene caso, es un combate que no le interesa a la gente por el estilo que el cubano tiene, sólo corre y abraza, no quiere entrar a fajarse. Yo quiero darle al público peleas de Leo como a mí me gustan, llenas de golpes y boxeo”, sostuvo José Santa Cruz, padre y entrenador, quien pasa alrededor de cuatro horas al día viendo peleas.

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