México despejó una de sus mayores preocupaciones rumbo a Río 2016: sus clavadistas y nadadores podrán competir bajo la bandera mexicana en los Juegos Olímpicos, pese a una suspensión de la Federación Internacional de Natación (FINA).
El arreglo fue anunciado por el presidente del Comité Olímpico Mexicano, Carlos Padilla, que viajó la semana pasada a Lausana, Suiza, en busca de una solución cuando faltan cinco meses para Río.
“La identidad de México ha sido rescatada para los Juegos Olímpicos de Río 2016”, dijo Padilla.
La suspensión se mantendrá, sin embargo, para competencias organizadas por la FINA, como ocurrió en la reciente Copa del Mundo.
En esa ocasión, Rommel Pacheco, que no pudo vestir el uniforme de México, subió al podio a recibir la medalla de oro en trampolín con una camiseta de Popeye y cantó el himno mexicano a ‘capela’.
México fue suspendido por la FINA por su negativa a pagar una multa de cinco millones de dólares por renunciar a organizar el Mundial de Natación de 2017 en Guadalajara por recortes al gasto público.
El caso está en manos de la Corte Arbitral del Deporte y los deportistas siguen con la prohibición de vestir el uniforme en las competencias de FINA, donde participan bajo bandera del organismo.
Padilla anunció que hubo acuerdo con el COI y la FINA, exclusivamente en lo que respecta a Río.
“Se evita así que nuestros atletas, como ocurrió recientemente, utilicen caricaturas o dibujos alusivos en sus camisetas, evitando también que el himno nacional lo interpreten nuestros deportistas solos a ‘capela’, sin tener el orgullo de escucharlo en todo el recinto deportivo”, dijo Padilla.
La Federación Mexicana de Natación manifiestó su beneplácito por la decisión del COI.
“Son independientes los temas de un conflicto comercial y legal con motivo de la cancelación de los Mundiales de Natación entre la FINA y la FMN, a la participación de las disciplinas acuáticas de México en los Juegos Olímpicos”, expuso en un comunicado.