Durante la temporada pasada, el dominicano Robinsón Canó salió al terreno de juego con la franela de los Mariners de Seattle, la cual —por primera vez en su espalda— llevó su apellido acentuado. Un acto de reivindicación cultural del pelotero latinoamericano en Grandes Ligas, quien inspiró la campaña más exitosa hasta el momento que ha tenido la Liga en territorio donde el beisbol se tilda con la pasión con la que se habla y juega.

Con la influencia de Canó, la agencia LatinWorks, con sede en Austin, elaboró un comercial que se estrenó en el día inaugural de 2016. Presumió la esencia del jugador latino y la diferencia que marca en el diamante, al igual que lo hace un apellido acentuado. Un minuto en el que se supera el campo ortográfico y se invita a seguir dejando huella en lo que nos define como hispanoamericanos.

De abril a junio, “Ponle Acento” tuvo un alcance de 47 millones de personas en Twitter y más de 68 mil likes en Instagram. Números que no hubieran sido posibles sin el impulso del mexicano Adrián González, quien —al igual que lo hace con los Dodgers de Los Ángeles— se voló la barda al tildar su apellido y retar a sus compañeros latinos a hacer lo mismo, lo que repercutió en 28 peloteros de Grandes Ligas.

“Adrián vio el comercial y lo hizo propio. Él siempre está impulsando lo mexicano y lo latino, le cayó redondo. No estuvo planeado que Adrián formara parte de la campaña. Nunca lo contactamos, él lo tomó, puso el acento y sirvió para que llegara a más personas”, relató el mexicano Alberto Calva, creativo de LatinWorks.

El costo de “Ponle Acento” fue de 120 mil dólares de producción y necesitó tres meses en su elaboración, en la que estuvo inmiscuido el regiomontano Mauricio Dávila, quien es el director creativo para la cuenta de MLB, además de otras 17 personas entre latinos y estadounidenses, quienes aprendieron a pensar en español para conseguir el éxito.

La campaña no sólo se volvió viral entre los seguidores del beisbol, sino que alcanzó otros escenarios, como el de los espectáculos, donde el actor de origen mexicano Mario López decidió acentuar su apellido, al igual que la artista Angélica María, cuando develó su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood.

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