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LAS VEGAS.— El orgullo de boxeador lo tiene herido. Más allá de haber perdido sus coronas mundiales, sabe que se le fue una oportunidad única de llegar a ser un referente en el boxeo mundial, en donde reclama estar. Pero Saúl Canelo Álvarez (42-1-1, 30KO) advierte que esta derrota ante Floyd Mayweather Jr. (45-0, 26KO) no es el fin.
“Hice lo que pude hacer en el cuadrilátero, con inteligencia. Pero así es esto, no me salieron las cosas. Ahora hay que descansar, seguir adelante, que esto no acaba aquí. Tengo 23 años, tengo toda una carrera por delante”, asegura el tapatío.
Madrugada difícil para Canelo. Acaba de perder los fajines superwelters del Consejo y la Asociación Mundial de Boxeo. Su invicto tras 42 batallas terminó en los puños de quien mantuvo su estatus del mejor boxeador libra por libra. Estar ahí con la mirada agachada y recibiendo las palabras de consolación de Mayweather —que lo venció por decisión mayoritaria la noche del sábado en el MGM Grand— no es lo que había soñado. Está dolido, más allá de lo físico.
“Es una de las cosas que más me pegan en el orgullo, pues uno no quiere salir aquí con una derrota, pero así es. Me tocó perder y qué más puedo decir”, apunta en charla con un reducido grupo de medios hispanos.
En medio de su tristeza, sus ojos se iluminan y la sonrisa aparece de nuevo. Le acercan a su pequeña hija de cinco años, Emily. Le da un beso y le pregunta cómo se encuentra. “Te amo”, le dice para después retomar sus reflexiones de la pelea y darle crédito a su rival.
“Uno aprende de todo. Él [Mayweather] es un peleador con mucha experiencia, yo tomaré experiencia de esto. Obviamente veré la pelea muchas veces para tratar de aprender los errores que cometí”, apunta.
“Llegaba a mi esquina y me decían que iba perdiendo; trataba de hacer más, pero se empezaba a mover más cuando yo iba hacia adelante. Simplemente, no pude hacer mi trabajo bien”, admite Saúl.
Richard Schaefer, director general de Golden Boy Promotions, la promotora de Álvarez, adelantó que Miguel Cotto podría ser un próximo rival para el mexicano e incluso no descartó que pudiera estar un título mundial en disputa para su reaparición.
“Tengo 23 años. Hay que seguir adelante, con más fuerza todavía y tomar esta derrota como una gran experiencia para mí”, concluye.