Las desilusiones han sido muchas en el Guadalajara.
En sus últimas 24 presentaciones, sólo consiguieron cuatro triunfos. Números que indican sinsabores y amarguras, que, curiosamente, no le impidieron ser campeón en el torneo pasado.
Chivas se presentará con esa racha en el Clásico Nacional. Desde el 8 de abril de este año, sólo vencieron en liga y Liguilla al Puebla (3-2), la vuelta de los cuartos de final del certamen anterior al Atlas (1-0) y el partido por el título a los Tigres (2-1).
En el Apertura 2017, sólo acumulan un triunfo sobre Pachuca por 1-3 en el estadio Hidalgo.
La depresión rojiblanca le tiene en el sitio 16 de la tabla de posiciones. Incluso, su técnico Matías Almeyda ya decidió ir por la Copa y asumir la eliminación prematura de la fase final.
“Viene un partido importante, nosotros estamos casi fuera de Liguilla. Será casi imposible, pero no nos relajamos, este equipo se caracteriza por su entrega, por la humildad y dar la cara, como ellos, la tienen pocos. Nos queda una Copa”, declaró el estratega rojiblanco tras la derrota ante Morelia, una caída que sumó la vigésima frustración chiva desde abril.