Ante un lleno se realizó la primera corrida de Feria en Moroleón, Guanajuato, donde se lidiaron cuatro toros de Barralva, dos de Fernando De La Mora, y uno de Xajay como sustituto del sexto de lidia ordinaria, donde, con el corte de dos orejas, triunfó Diego Silveti.
Juan José Padilla con su primero se mostró voluntarioso ante un toro con buena clase pero que careció de fuerza. Ante este astado de Barralva poco pudo hacer el jerezano, quien se mostró con voluntad y por encima del astado, mató de buena estocada para ser silenciado.
Con su segundo, el ‘Ciclón de Jeréz’ realizó una buena labor, sobre todo por derecha, con muletazos a su estilo que le fueron coreados por el tendido, una faena con mucho valor que finalizó con muletazos de rodillas calentando el tendido, dejó una buena estocada pero tuvo que usar el descabello en varias ocasiones y fue ovacionado tras dos avisos.
Octavio García ‘El Payo’ enfrentó primero a un toro de Fernando de la Mora, bueno y fuerte, al cual el queretano lo entendió en todo momento y se mostró siempre muy dispuesto ante la cara del astado, destacando tandas por el pitón derecho donde tiró del toro para romper en la faena, por el lado izquierdo ha conectado tandas a media altura que le fueron coreadas. Por ese lado el toro se movió con clase pero no como por el derecho. Lo mató de buena estocada teniendo petición de oreja que no concedió el juez de plaza, para quedar en una salida al tercio con mucha fuerza.
Ante su segundo, el diestro de Querétaro toreó muy despacio y aguantando las embestidas de un toro complicado. La afición se metió con el torero, pero aguantó con base en buenos muletazos, destacando una tanda por el lado izquierdo con temple y sentimiento, dejó una buena estocada y recibió palmas.
Diego Silveti tuvo una gran tarde en tierra guanajuatense. Ante su primero de Barralva pudo cuajar una faena interesante y que caló en el tendido, que pudo ver al Silveti que la afición espera.
Con el capote toreó muy despacio ‘a la verónica’ y después un buen quite por chicuelinas y el capote a la espalda; ya con la muleta empezó firme en el centro de la plaza con estatuarios, posteriormente por mano derecha con pases muy templados llenos de cadencia y gusto con remates muy toreros, una faena que cautivó al tendido y finalizó su labor con bernadinas muy ajustadas para matar de una gran estocada y cortar las dos orejas ante la petición de rabo, el astado de Barralva recibió los honores de la vuelta al ruedo, en tanto que Diego Silveti dio dos vueltas al ruedo, una acompañado por los ganaderos.
El cierra plaza era de Fernando de la Mora, el cual fue protestado y regresado a los corrales para que saliera al ruedo un astado de Xajay, con el que Diego estuvo muy dispuesto, pero se fue sin apéndice y con un par de volteretas. Al final del festejo el torero de dinastía salió a hombros quedando como único triunfador de la tarde.
