GUADALAJARA.— Alejado de su hábitat natural, el Rebaño Sagrado dimensiona la situación que vive. En las instalaciones de San Rafael, en el extremo opuesto de la ciudad respecto de Verde Valle, el presidente deportivo del equipo, Dennis te Kloese, reconoce la magnitud del problema: Chivas está en crisis.
Tres derrotas consecutivas han desatado la furia de la afición rojiblanca. Al directivo no le queda más que admitir que el Guadalajara, agonizante en el Torneo Clausura 2013, no puede vivir de su glorioso pasado. Los seguidores exigen un mejor presente.
“Yo creo que en Chivas, cuando pierde un partido, siempre hay crisis. No hay de otra, es la esencia del club. Aquí es difícil perder partidos, independientemente del rival. No podemos menospreciar ni al Atlante, ni a Jaguares, pero sí son partidos que nosotros obviamente, para aspirar a una calificación y un buen torneo, teníamos planeado ganar”, explica el holandés.
Pero la crisis no es reciente. En los últimos torneos, la escuadra tapatía ha hecho pocas apariciones en Liguilla. Y cuando lo hace, generalmente no es para asumir un rol protagónico. Hay consciencia de ello en la directiva.
“Como institución, eso nos dice que no podemos nada más vivir de nuestra tradición y el apoyo de la afición. También tenemos que entregar resultados y no se ha reflejado en la cancha con el primer equipo. Podemos pensar que estamos haciendo todo bien, pero si los resultados del primer equipo no dan, entonces algo no estamos haciendo bien”, advierte el dirigente.
Por eso, entiende reacciones de los seguidores, como la del lunes pasado, cuando expresaron su repudio hacia los futbolistas a través de una manta en Verde Valle.