Lewis Hamilton redujo a un punto la ventaja de Sebastian Vettel en el campeonato mundial de la Fórmula Uno, al conquistar el Gran Premio de Gran Bretaña por quinta ocasión, cuarta consecutiva.
En casa, el piloto de Mercedes aprovechó que un neumático del alemán se ponchó al término de la prueba.
“En general, no cometimos errores”, destacó el británico, luego de ser levantado en alto por una multitud de fanáticos locales.
Lewis lideró de principio a fin y consiguió un triunfo tan holgado que pudo echar un vistazo al desarrollo de la carrera en las pantallas gigantes colocadas a lo largo del circuito, según relató él mismo.
Vettel marchaba en el tercer puesto de cara a la penúltima vuelta en Silverstone cuando se presentó el percance, inmediatamente después de que le ocurrió lo mismo a Kimi Raikkonen, su compañero en Ferrari, mas el finlandés sí alcanzó a colarse al podio, desplazando a Vettel del tercer puesto.
El líder del campeonato y tetracampeón mundial cayó al séptimo lugar y perdió su ventaja de 20 puntos que tenía sobre Lewis antes de la décima carrera de la temporada, durante una tarde nublada en el centro de Inglaterra.
“Evidentemente, la balanza se ha inclinado en este fin de semana”, dijo Hamilton. “Eso es bueno para la Fórmula Uno y para los fanáticos, pues habrá una cerrada lucha”.
Numerosos fragmentos del neumático de Vettel quedaron regados por la pista. El alemán logró llegar a los pits a fin de realizar las reparaciones justo a tiempo para cosechar puntos que le mantuvieron como líder, antes del Gran Premio de Hungría, que se realizará el 30 de julio.
“Todo pudo salir un poco mejor pero, ¿fue un desastre? No lo creo”, comentó Vettel. “No pienso que haya alguien que tenga la culpa”.
En el duelo entre los volantes de Force India, el francés Esteban Ocon superó a Sergio Pérez. El mexicano llegó noveno. Su compañero fue octavo en el circuito de Silverstone.