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Cuatro meses después de interponer una demanda por agresión en contra de Rosalío Alvarado, presidente de la Federación Mexicana de Levantamiento de pesas (FMLP), Jennifer Cantú espera que el dirigente reciba una sanción ejemplar por gritarle y ofenderla durante el Mundial de la especialidad realizado en Polonia.
“Pido que se haga justicia, soy una seleccionada nacional reconocida y no es justo que como deportista se me trate así”, relató, y acusó a Alvarado de querer excluirla del representativo nacional sin justificación.
Jennifer compitió en la justa del orbe y falló sus tres intentos de envión. Su resultado enfureció al federativo potosino.
“Me dijo que me largara para Monterrey y a mis compañeras les dijo que no me hablaran o también a ella las sacaría de la selección. Fue algo muy penoso y también injusto”, contó.
El proceso de su demanda, añadió, está en su etapa final. Será en las próximas semanas cuando la Comisión de Apelación y Arbitraje del Deporte (CAAD), le dé una respuesta.
“Han sido momentos dificiles para mí y ojalá sus acciones tengan consecuencias. Espero pronto pueda olvidar esta experiencia y seguir con la mira puesta en los Juegos Olímpicos”.
Por ahora, Cantú se recupera de un desgarre en la pierna, acude a terapias físicas y con el paso de las semanas incrementará el trabajo físico que le permita participar en el selectivo nacional en el que se definirán a las tres halteristas que asistirán a la justa veraniega en Río de Janeiro.
“Estoy enterada de que México tiene tres plazas olímpicas y que aún no se sabe para quién serán. En lo personal estoy afinando detalles para estar lo mejor posible físicamente y así poder pelear por uno de los lugares. Si no es así en el próximo ciclo buscaré ser seleccionada”.
Entre los principales logros de la halterista destacan medallas en la Olimpiada Nacional, también fue número dos del ranking mundial juvenil y campeona panamericana.