SOCHI, Rusia.— La biatleta bielorrusa Darya Domracheva se perfila como la “reina” de Sochi, tras lograr ayer su tercer oro en la localidad rusa, en una jornada en la que Alemania se afianzó al frente del medallero con su triunfo en la prueba de saltos de trampolín por equipos.
Domracheva va camino de ser una leyenda tras lograr ayer su tercer triunfo en Sochi al imponerse en la prueba de 12.5 kilómetros con salida en masa.
La biatleta, de 27 años, se situó en la senda de un mito como el noruego Ole Einar Bjoerndalen, ganador de doce medallas olímpicas, que logró en 2002, en Salt Lake City, cuatro oros en biatlón.
Un récord que la bielorrusa, que ya se impuso en Sochi en los 10 kilómetros persecución y 15 kilómetros individual, podría igualar el próximo viernes en la prueba de relevos de 4x6 kilómetros.
En otras competencias, los patinadores estadounidenses Meryl Davis y Charlie White, actuales número uno en la clasificación de la Federación Internacional, se tomaron la revancha de la final olímpica de Vancouver, en la que fueron segundos, tras lograr el oro en Sochi en la modalidad de danza.
Bajo los acordes de Scheherazade del compositor Rimski-Korsakov, Davis y White bordaron un programa libre, que les valió una nota de 116.63 puntos, para sumar un total de 195.52, casi cinco puntos más que sus grandes rivales, los canadienses Tessa Virtue y Scott Moir, campeones en Vancouver, que esta vez debieron conformarse con la plata.
El bronce correspondió a los rusos Elena Ilinykh y Nikita Katsalapov, que sumaron la decimoctava medalla para un conjunto anfitrión, que vivió ayer su momento de gloria con la victoria de Alexander Zubkov y Alexey Voevoda en la prueba masculina de bobsleigh a dos.
Zubkov y Voevoda, que fueron bronce en Vancouver 2010, acabaron con la hegemonía de Alemania en esta especialidad, en la que los germanos, que ayer no pudieron subir al podio.
La pareja rusa, que batió hasta en dos ocasiones el récord del trazado, se valió de la experiencia del piloto Alexander Zubkov, que con la de ayer suma tres medallas olímpicas, y la fortaleza del frenador Alexey Voevoda.
No todo fueron malas nuevas para Alemania, que se afianzó en el primer puesto del medallero tras el triunfo en el prueba de saltos de trampolín en la que vencieron al gran favorito, Austria.
Ni la presencia de figuras como Gregor Schlierenzauer, el saltador con más victorias en la historia de la Copa del Mundo, Thomas Morgenstern, triple campeón olímpico o Thomas Diethart, ganador del último Cuatro Trampolines, evitó la derrota austriaca.
