Justo el escenario desde donde ahora se pide paz, fue el motivo para que se recrudeciera la enemistad entre América y los Pumas en la década de los 70.
Universidad fue invitado en 1975-76 a actuar en el Estadio Azteca junto con los otros cuatro equipos de la capital [América, Necaxa, Atlante y Cruz Azul] que jugaban en el Coloso de Santa Úrsúla.
“A esos clubes los manejaba, para variar, Televisa, entonces le dijeron a los de Pumas que necesitaban ir a jugar al Estadio Azteca y Guillermo Aguilar Álvarez [ex presidente felino] les dice: ‘¿Qué les pasa? Si yo tengo un estadio’, y que le vuelven a decir: ‘No, pero ustedes...’ y él contestó: ‘Ni madres, yo no voy a jugar al Azteca, nosotros jugamos en el estadio de CU’”, recuerda entre risas quien fuera psicólogo auriazul durante más de 30 años, Octavio Rivas.
La negativa de los Pumas para cambiar de estadio hizo que la televisora de San Ángel en aquellos años emprendiera una estrategia para ignorar lo hecho por los del Pedregal como represalia.
Televisa, no obstante, no contaba con que los felinos conseguirían el titulo en la siguiente temporada.
“Empezaron a decir a los de los noticiarios que como que se les olvidaban los resultados de Pumas, y al año siguiente fuimos campeones y ya no nos pudieron olvidar. Y a partir de entonces, contra el América se decía: ‘Se puede perder contra quien sea, menos contra estos’, y a ellos les decían lo mismo. Los chavos de fuerzas básicas de América y Pumas se les dice así. De ahí fue surgiendo la rivalidad”, explica Rivas.
El encono entre ambos clubes creció en esos años, e, incluso, trascendió hasta el ámbito de las empresas de televisión que tomaron partido por cada escuadra.
“Los de Televisa trataban de echarle más porras a su equipo y en esa época, el Canal 13 era del gobierno y entonces decían, ah sí, Televisa le echa a Pumas, entonces nosotros vamos a ser los defensores de Pumas. Desde entonces estábamos casados Televisa con América y el 13 con Pumas”, afirma.
—Los comentarios de José Ramón Fernandez contra el América ¿permeaban a los jugadores?
“Sí, porque de alguna manera vas calentando... Es como si hoy ves por la televisión lo que hablaban del candidato de Venezuela Nicolás Maduro], que con su pajarito y todo, te botas de la risa; la gente se calienta”.
Además —expone el psicólogo— hubo algunos seguidores que empezaron a considerar a las Águilas como un equipo que representaba a la clase alta, “los fufurufus-fufurufus”.
Para el partido del sábado, Rivas asegura que Pumas “vamos a seguir tumbando gigantes, porque si hasta al Tuca[Ferretti], que es nuestro cuate, le dimos en su mouser [por el 2-1 ante los Tigres]”.
Es decir, augura un triunfo auriazul en el Estadio Azteca.