Además de militares y empresarios, la historia del Atlante ha estado ligada a organismos gubernamentales. El Instituto Mexicano del Seguro Social (1978-84) y el hoy desaparecido Departamento del Distrito Federal (1984-87) lo administraron, después de la etapa de Fernando González, esa que José Manuel Núñez, homónimo hijo del general que fue dueño del club, cuestiona por su origen.
“El Atlante es como el Ángel de la Independencia, que no sólo es el símbolo de la capital, sino de todo México”, afirma, con seriedad. “El Atlante es un equipo que nació en el pueblo, por el pueblo y para el pueblo”.
“He criticado mucho el manipuleo que se ha hecho con el equipo en los últimos 25 años, que si lo vendió o no el General. Pido que me enseñen un documuento firmado por el General vendiendo al Atlante a ‘Fernandón’ González o que lo haga el Seguro Social... Alguna cosa que diga que el General lo vendió, porque nunca pasó eso”.
Núñez dejó de tener el control de la institución en 1966 y, aunque reconoce que durante varios años las cosas no se hicieron mal, todavía le lastima lo sucedido hace medio siglo.