México todavía no es una opción para realizar la Copa América del Centenario, que se mantiene firme para realizarse en Estados Unidos el próximo año, se anunció ayer.
Una ola de rumores desatada desde la semana pasada ponía a nuestro país como una sede alterna en caso de que los estadounidenses declinaran realizar el torneo, programado para el próximo verano, como una gran celebración para los 100 años del organismo sudamericano.
La reunión emergente en un hotel del país a la que no acudió federativo alguno de la Federación de Estados Unidos alimentó más el fuego de la especulación e incluso el prestigiado diario The New York Times publicó que los estadounidenses habrían declinado realizar el torneo. Pero nada de eso ha ocurrido, al menos hasta ahora.
“Se dio una reunión entre Concacaf, Conmebol y los socios televisivos de la Concacaf que son Televisa y Univisión, tuvimos representantes de las instituciones, incluyendo a miembros del Comité Ejecutivo tanto de Concacaf como de Conmebol, ellos estuvieron vía telefónica”, dijo Jürgen Maika, director de comunicación y mercadeo de Concacaf en una breve conferencia de prensa en la que no aceptó preguntas.
“Fue una reunión muy productiva en donde todos los individuos y las organizaciones llegamos a un punto en el que seguimos totalmente alineados, con la meta de llevar una Copa América Centenario a su realización en los Estados Unidos, en las fechas previamente anunciadas. Sabemos que hay pasos que debemos que seguir dando para que esto se lleve a cabo, pero esta alineación entre todos queda muy clara”, agregó antes de retirarse de un salón en un hotel del aeropuerto capitalino.
El torneo está programado para realizarse del 3 al 26 de junio del año próximo con 10 selecciones de Sudamérica y seis de Concacaf.
La realización del mismo ha estado en duda desde mayo pasado, cuando estalló un escándalo de corrupción en la FIFA que alcanzó a altos directivos de la Conmebol, entre ellos dos de sus ex presidentes, el uruguayo Nicolas Figueredo y el paraguayo Nicolás Leoz, quienes fueron acusados de participar en actos de crimen organizado y sobornos, entre otros. Los dos tienen solicitudes de extradición a Estados Unidos.