De acuerdo con el operador de casinos y sportsbooks, William Hill, el cuatro por ciento del dinero que recibieron para la pelea entre Saúl Álvarez y Gennady Golovkin, fue destinado al empate, mientras que el 47% de las apuestas que ingresó fue a favor de un triunfo por nocaut del boxeador kazajo.
El empate entre el Canelo y GGG pagó +2000 dólares por cada 100 en juego. Para un cliente asiduo a las apuestas que prefirió omitir su nombre, los expertos que se encargan de colocar los momios, corrieron un gran riesgo al colocar esa línea (+2000), cuando se podía presagiar un resultado cerrado.
“Tenías que tomar esa apuesta pagando +2000. Si había una pelea que podía terminar en empate este año era Canelo-Golovkin. Puedo decir que Danny Jacobs merecía un empate con GGG al recuperarse y hacerlo ver vulnerable”, declaró el hombre de 42 años que dedica su vida a las apuestas.
El entrevistado confesó que logró colocar una apuesta de 300 dólares en la que participaron varias personas, aunque no quiso exhibir el recibo que emite la caja registradora.
“Genady Golovkin quería la pelea desde hace dos años, necesitaba un rival de nombre para ganar una buena bolsa y Oscar de la Hoya se lo dio con alguna condicionante como los jueces, De la Hoya orilló a que fueran esos jueces”, insistió.
Aunque el empate fue el rubro que menos dinero ingresó entre todas las opciones que ofreció William Hill, el 15 por ciento de los tickets fue a este resultado al dejarse seducir por el +2000.
“Normalmente se apuestan cantidades pequeñas a los empates. Los casinos se aprovechan de las personas que quieren volverse ricas de un solo golpe, pero aquí se equivocaron, creo que si yo hubiera contado con mayor liquidez, hubiera ido con varios grandes, arriba de 3 mil dólares, yo pienso”.
Con la decisión de los jueces, los centros de apuestas se beneficiaron al retener el grueso de los varios millones de dólares que se repartieron en las apuestas creyendo en la victoria del kazajo Gennady Golovkin o el tapatío Saúl Álvarez de cualquiera de las formas.
El 47% del dinero se inclinó por la victoria de GGG por nocaut efectivo, técnico o descalificación, mientras que el 37 por ciento de las boletas de apuestas fueron con el tapatío, que fue respaldado por los miles de mexicanos que celebraron el Día de la Independencia, creyendo que su compatriota terminaría antes de los 12 rounds con el campeón mundial medio de tres diferentes organismos (CMB, AMB, OIB).
En los próximos días se darán a conocer las cifras finales que dejó la pelea entre Saúl Álvarez y Gennady Golovkin, pero la segunda parte ya está en el horno, esperando sólo la temperatura económica con la que se va a cocinar un negocio que beneficia a todos, incluyendo a Golovkin, que aunque hubiera salido con el puño arriba como la mayoría de los analistas sostienen, no tendrá la oportunidad de cobrar otra gran bolsa como la que le dio Canelo.
Para las revancha ya existen momios virtuales que ponen al kazajo de nuevo favorito con -160 por +140 de Álvarez.