BARCELONA.— El Barcelona venció 4-0 con toda facilidad al Ajax, gracias a un hat-trick de Lionel Messi, quien animó una noche de Liga de Campeones que tuvo más goles que espectáculo.
Si Cristiano Ronaldo hizo el martes tres goles con el Madrid, Messi no se quedó ayer atrás y anotó idéntica cifra para liderar un sencillo triunfo de un Barcelona que no ofreció su mejor futbol.
Fue una alegría para Gerardo Martino, el técnico del Barcelona, que el martes perdió a su padre. Le dio tiempo de celebrar su primera victoria en Liga de Campeones antes de volar anoche hacia Argentina para asistir al sepelio.
El Barcelona mostró su cara más plana durante la primera mitad, algo que se viene repitiendo más de lo que desean sus hinchas en el inicio de la “era Martino”.
El Ajax, cuarto clasificado en la Liga holandesa, jugó muy cómodo y hasta se animó a buscar el arco contrario en la primera mitad. De nuevo Víctor Valdés, el arquero del Barcelona, fue salvador de su equipo con un par de intervenciones provindenciales.
El Barcelona sólo pareció animarse en los minutos finales de la primera parte, con un par de arrancadas de Messi y con intentos de Neymar, el único jugador azulgrana que se atrevió a encarar. La primera parte finalizó con bostezos de la hinchada local, que se aburrió.
Mejoró algo el equipo azulgrana en la segunda mitad, producto de dos circunstancias: el segundo gol del Barcelona, que quebrantó la moral holandesa, y la fatiga acumulada del Ajax.
El partido decantó definitivamente su rumbo a los 55 minutos. El equipo visitante perdió un balón, Sergio Busquets dirigió el contraataque y el balón fue a parar a Messi. El argentino dejó tirados a dos defensas y marcó con un disparo seco.
Entonces, el Barcelona pasó a jugar con toda comodidad y muchos espacios, mientras al Ajax se le acabó la fe, si es que alguna vez la tuvo.
La sentencia llegó a los 68 minutos, con un centro de Neymar desde la izquierda y un sencillo remate de cabeza de Gerard Piqué. Fue un enorme regalo de la defensa del cuadro holandés.
La noche estaba para Messi, implacable ante el gol sin necesidad de participar mucho en el juego de su equipo. A los 75 minutos completó su hat-trick con un precioso disparo suave y colocado que provocó la admiración en la grada.
Al Ajax ni siquiera le quedó el consuelo de irse del Camp Nou con un gol, cosa que pudo hacerlo con un penalti a los 77 minutos. Pero Valdés paró el lanzamiento de Sighthorsson. Junto a Messi, el arquero azulgrana fue el jugador más sobresaliente de su equipo.
El Barcelona goleó sin necesidad de jugar a nivel notable.