Volver a enfrentar a Juan Francisco Gallo Estrada sería cosa sencilla. Poco le importa si ahora es monarca mosca, tanto por la Organización (OMB) como por la Asociación Mundial de Boxeo (AMB). Para el nicaragüense Román Chocolatito González, el campeón unificado mexicano no tiene opción ante sus puños y, por eso, acepta el reto de medirse nuevamente con él.

“Si él [Francisco Gallo Estrada] quiere volver a pelear nuevamente conmigo, pues que negociemos la bolsa con las personas que lo están manejando y a ver cuándo se da esa pelea. Yo estoy listo”, lanza El Chocolatito González, en su visita a la redacción de EL UNIVERSAL.

Nicaragüense de nacimiento. Invicto tras 40 peleas, sin ningún empate. Con su reciente triunfo ante el japonés Akira Yaegashi, en la tierra del peleador nipón, en donde le arrebató la corona mosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Román González entró al selecto grupo de campeones del mundo en tres divisiones distintas.

Ese tremendo palmarés le da la confianza para aceptar el reto de sostener un segundo combate ante Estrada y de hasta asegurar que su victoria está garantizada. Poco le asusta que el campeón sonorense haya vencido a tremendos adversarios como Brian Viloria, Milán Melindo o Giovani Gallardo.

“Nada cambiaría en un nuevo combate. Lo único que puedo decir es que si me llegara a enfrentar de nuevo con él [Gallo Estrada], sería una pelea súper fácil, más que la primera vez”, advierte un “caliente” Chocolatito.

El monarca mosca del CMB reconoce que en la primera batalla, en donde González se llevó el triunfo por decisión unánime en pelea celebrada en noviembre de 2012, en Los Ángeles, California, la pelea fue cerrada. Pero pese a los reclamos del orgullo de Puerto Peñasco, El Chocolatito cree que fue el vencedor.

“Fue una pelea muy apretada, muy difícil, pero siento que le gané, por dos puntos o un punto, pero le gané. [Estrada] es un buen peleador, un buen muchacho y tiene lo suyo, como yo tengo lo mío”, reconoce.

Antes de sentarse a negociar la pelea entre los dos mejores boxeadores de peso mosca, el triple campeón mundial debe superar un compromiso pactado para el 22 de noviembre en Japón ante un rival por confirmar. Una fecha próxima que lo obliga a regresar al gimnasio cuanto antes. No sin antes disfrutar de lo que considera “el triunfo más importante de mi vida”.

“La noche de mi coronación fue una linda velada, ya todo el pueblo japonés estaba esperando esa pelea. Fue lo mejor que me ha pasado en mi vida, la pelea de mi sueño. Todos en mi equipo hicimos un buen trabajo y, gracias a Dios, salimos con la mano en alto. Ahora queda cuidarlo y retener el campeonato”, advierte.

Ya sea El Gallo Estrada, campeón OMB y AMB, u otro rival que tenga que enfrentar en este su tercer reinado, el invicto Chocolatito se dice listo para quien se atreva a retarlo.

“¡Al que me pongan, mi hermano! Al rival que sea, estoy listo. Yo para eso soy campeón. La verdadera pelea está en el gimnasio. Eso es lo que me ha hecho ser tres veces campeón del mundo”, subraya el orgulloso campeón.

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