Moisés Muñoz puede organizar una fiesta para festejar que cumple 15 años de su debut en la Primera División.
El hoy arquero del América está convertido en uno de los porteros más regulares del máximo circuito. Un hombre acostumbrado a renacer de las cenizas y a aprovechar las segundas oportunidades.
Lo mismo hace goles que valen un título, que se mantiene en la sobriedad debajo de los tres postes.
No obstante, su trayectoria no le ha servido para ser un guardameta mundialista, pues ha sido marginado en dos ocasiones [Alemania 2006 y Brasil 2014.
“Parece que eso no es ajeno a mí [las resurrecciones]. Eso ha sido parte de mi vida profesional para regresar mejor que antes, trabajar más duro y hay que seguir así. Ahora me enfoco en mi trabajo en América, donde me ha ido bien”, aseguró a este diario, tras quedar fuera de la última Copa del Mundo.
Moi Muñoz, quien ha defendido tres camisetas en su carrera [Morelia, Atlante y las Águilas] tiene un registro de 432 partidos en el máximo circuito en los que ha recibido 538 anotaciones [promedio de 1.24 por duelo].
Apenas a los 19 años, Tomás Boy decidió debutar al novato Muñoz en un duelo ante Pachuca. El michoacano defendió por siete minutos la cabaña de Monarcas en un duelo que su equipo perdió 4-2.
Fue campeón como suplente del argentino Ángel David Comizzo en el Invierno 2000.
Ganó la titularidad hasta el Apertura 2002. Su regularidad y constancia fue palpable y comenzó a competir por un lugar en la Selección Mexicana.
Ricardo Antonio La Volpe lo mantuvo en la mira en su proceso rumbo a Alemania 2006. Lo marginó en los últimos meses.
Su carrera parecía que decaería cuando emigró al Atlante. En los Potros de Hierro se acostumbró a estar con un equipo que pelea más los puestos de abajo que por los cetros del futbol mexicano.
Mas Miguel Herrera confió en él. Tuvo campañas sólidas como azulgrana y cuando El Piojo se convirtió en el timonel del América se fue a Coapa para suplir a Guillermo Ochoa. Nadie extrañó al apodado Paco Memo.
Moi cumplió a tal nivel, que en una final que parecía perdida ante Cruz Azul [Clausura 2013] marcó el gol del empate global y en la tanda de penaltis fue la figura para la undécima corona del americanismo.
Luego, Herrera le dio el voto de confianza para rescatar el pase mundialista ante Nueva Zelanda. De nuevo, el arquero amarillo formó parte de los logros empiojados.
México fue al Mundial, pero Herrera decidió no convocarlo “porque no me toqué el corazón para armar la lista final.
Muñoz vivió su segundo tropiezo para llegar a un Mundial.
“Estoy bien, le di vuelta a la página. Me ha mantenido en buen nivel. No hay mucho que puedas hacer. Hubo frustración por no ir al Mundial, siempre he estado con las ganas de ir a la Selección”, asume.
Tras 15 años en Primera, a Moi le queda el objetivo de ir al Mundial.