Nueva York.— En el momento menos indicado llegó la derrota para el “animal” Jake Arrieta, quien no pudo detener el ímpetu de los Mets de Nueva York, que ayer sumaron su segundo triunfo al pasar 4-1 sobre los Cubs de Chicago.
Quien sí estuvo prácticamente intratable fue el novato Noah Syndergaard quien consiguió su primera victoria en Playoffs al lanzar cinco entradas y dos tercios en los que aceptó tres hits, una carrera, regaló una base por bolas y ponchó a nueve elementos para dejar su efectividad en 1.59 en postemporada.
La ofensiva de los Mets apenas entró al terreno de juego y empezó a atacar a Arrieta, quien no perdía desde el 25 de julio. El pitcher de los Cubs sumó 14 salidas consecutivas sin conocer la derrota, incluida dos de postemporada.
David Wright se encargó de encender la fiesta con doblete al central que mandó a la registradora a Curtis Granderson con la carrera de la quiniela. Con Wright estacionado en las almohadillas, Daniel Murphy disparó un cuadrangular que terminó en por detrás del jardín derecho que puso la pizarra 3-0, pero sobre todo dejó en evidencia que Arrieta no es intocable y menos invencible como lanzó en 2015.
Después de regalar una base por bola pensando que Yoenis Céspedes sería una presa fácil para un doble play y con ello colgar un cero, el cubano respondió con un sencillo dentro del cuadro que dio oportunidad a Curtis Granderson de llegar al plato con la cuarta carrera de la noche en Citi Field.
Arrieta se mantuvo sobre la loma cinco entradas en las que recibió cuatro imparables, concedió cuatro carreras limpias, un par de pasaportes y ocho chocolates para dejar su ERA en 7.20, número lejano a lo que estableció a lo largo de la campaña (1.77) y por lo cual es candidato a obtener el Cy Young de la Liga Nacional.
Una pequeña reacción de Chicago se dio en la apertura del sexto rollo con un palo de dos esquinas del tercera base Kris Bryant que remolcó al jardinero Dexter Fowler.
El cerrador dominicano Jeurys Familia se encargó de sacar los últimos tres outs del encuentro, no sin antes pasar algo de apuros debido a un sencillo de Anthony Rizzo que llegó a estar en posición de anotar, pero finalmente se quedó anclado gracias a un rodado de Chris Coghlan que fue puesto out.
El jardinero Curtis Granderson fue el hombre del partido, aunque no produjo carrera.