Roberto Osuna juega su primer año como un pelotero potentado en Grandes Ligas. El sinaloense recibirá 5 millones 300 mil dólares esta campaña, el contrato más jugoso para un relevista en la Liga Americana.
Los Blue Jays de Toronto vieron cómo El Cañoncito se convirtió en uno de los mejores cerradores durante la campaña pasada, con promedio de 3.6 en carreras limpias permitidas y 39 salvamentos, en 66 juegos. Tenían que amarrarlo.
A sus 22 años de edad, Osuna estará sobre el montículo como un pitcher con más experiencia y familiarizado con los potentes bateadores de la MLB. En su tercera temporada en la franquicia canadiense tendrá todavía una mayor responsabilidad para concluir los duelos y contribuir para que la novena regrese a Playoffs, tras ausentarse durante el otoño de 2017.
De los 66 juegos que lanzó el mexicano, se le cargaron cuatro derrotas, con los Cubs de Chicago, los Astros de Houston, los White Sox de Chicago y los Angels de Los Ángeles, —ninguna frente a un conjunto de su misma división, Este de la Americana—.
Ahí estará la clave para los Blue Jays y el sinaloense. De los 39 salvamentos del diestro, 19 fueron contra rivales directos.
Toronto necesita más consistencia frente a su competencia en el Este cuando el tricolor no esté sobre el montículo. De los 76 duelos, Toronto solamente pudo ganar 33 (10 a Yankees de Nueva York y Rays Tampa Bay, siete a Orioles y seis a Boston). La poca efectividad lo mandó al cuarto sitio de la división.
Lo mejor que tendrán los Blue Jays a partir del jueves 29, cuando arranquen las Grandes Ligas, será el bullpen.
El otro mexicano con un puesto estelar es Marco Estrada, también diestro y del norte de nuestro país, pero no de Los Mochis, Sinaloa sino de Ciudad Obregón, Sonora.
Marco está en la rotación de abridores en la carpeta del manager John Gibbons, que también incluye otros brazos talentosos. Marcus Stroman y J.A Happ aparecen como los más destacados.
El tamaulipeco Jaime García, con experiencia de una década en MLB, también estará en las filas de Toronto para esta temporada.
El problema para la novena canadiense está en el ataque. En 2017 fue el equipo que menos acumuló carreras en la Americana, con 693; a pesar de utilizar a 60 peloteros, la mayor cantidad en los 41 años de historia de la franquicia.
La esperanza sobre el plato está puesta en Teoscar Hernández y Kendrys Morales.