En la Concachampions, el América puede llenarle la canasta de goles a un equipo de Puerto Rico, pero en la Liga a las Águilas se les ha olvidado cómo anotar.
Los 270 minutos que tienen los azulcremas sin encontrar la red rival hablan de una amnesia que les ha provocado perder el paso y ceder puntos con rivales que ocupan los lugares de abajo en la tabla.
Si mantienen esa racha y los jugadores no logran recuperar la memoria hacia el gol, el liderato del Apertura 2014 estaría en riesgo; ademása de que el Pachuca, su rival de esta tarde en el Estadio Azteca, no es una “perita en dulce” en este torneo.
De paso igualarían el registro negativo logrado en el Clausura 2008, en el que ligaron cuatro partidos de fase regular con la ofensiva en blanco [en la Liguilla del Clausura 2012 y el arranque del Apertura 2012 también sumaron dos pares de encuentros sin marcar].
Miguel Layún, consciente de que hay diferencia entre los equipos de la Concacaf y el máximo circuito mexicano, descarta una goleada americanista como la que le propinaron al club Bayamón boricua a media semana.
“No puedo pensar que le vamos a meter 10 goles al Pachuca. Mienmtras más holgado sea va a ser mejor para todos nosotros, pero lo principal es que la gente vea entrega y determinación”, ataja el lateral.
Aunque sabe que su equipo está en deuda:“Debemos un buen partido, se lo debemos a la gente y es importante para nosotros que en casa retomemos el triunfo”.
Como es obvio, para ganar el América requiere goles. Los delanteros amarillos no están finos, pese a que son considerados —al menos en cuanto a nombre— de lo mejor de la Primera División.
Oribe Peralta fue el último en anotar ante Morelia y acumula 270 minutos en blanco. Michael Arroyo, Luis Ángel Mendoza, Luis Gabriel Rey y el canterano Martín Zúñiga se mantienen sin anotar en la Liga.
El volante Rubens Sambueza suma un gol en el Apertura y lo hizo justo en el duelo ante el hoy sotanero Monarcas.
Ese ataque que suma 18.7 millones de dólares no ha correspondido a las exigencias americanistas.
Layún llama a sus compañeros a mejorar la contundencia para sacar los tres puntos, porque “mientras más holgado sea el marcador es mejor para nosotros, que la gente vea entrega y darles una victoria es la mejor satisfacción que se le puede dar en este momento”.
La última vez que el América enfrentó a Pachuca, el duelo fue vertiginoso y la zaga emplumada sufrió. La velocidad de Hirving Lozano fue suficiente para hacer el gol de la victoria tuza el torneo pasado.
En el Nido no quieren sorpresas. Layún busca que nadie les quite puntos en el Estadio Azteca.
“No nos gusta ver estas situaciones [de no meter goles], pero en casa, tenemos que ser una muralla impenetrable. Estar de locales debe ser motivo para sumar de a tres y aunque nosotros solemos ser eficientes de locales y visitantes, es muy importante hacernos fuertes en casa”, considera el lateral.
Para las Águilas, volar como los anfitriones significa ratificar la punta y reencontrarse en la ruta hacia las redes rivales. Oribe y compañía suspiran por un grito de gol que les aleje la presión.
Pachuca querrá evitarlo a toda manera. Los hidalguenses quieren volver a frustrar al americanismo que han presumido en las últimas semanas que nadie los ha logrado bajar del liderato del torneo, pese a su amnesia goleadora.
