Puebla.— La sequía de goles se mantiene con los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León (ANL), que aunque tuvieron un hombre más en el segundo tiempo, se conformaron con el empate sin goles ante Puebla.
Con este resultado, el cuadro de La Franja llegó a 15 unidades, en tanto que el campeón vigente sumó 16, en este duelo disputado en el estadio Cuauhtémoc que sufrió la invasión felina, ya que más de 5 mil aficionados regios se mostraron en su tribuna.
Como siempre, Puebla se vio como uno de los cuadros más incómodos de la Liga nacional, poniendo en serio peligro al equipo con la nómina más alta del futbol mexicano.
Durante el primer tiempo, el control del balón y la velocidad de Matías Alustiza puso en complicaciones a la cabaña defendida por Nahuel Guzmán.
Fue hasta la segunda parte cuando vino la expulsión de Christian Bermúdez, que los Tigres pusieron hacer valer su status de favoritos al título, con llegadas por los costados, pero nada que pusiera a trabajar seriamente al portero Cristian Campestrini.
Los Camoteros se repusieron del golpe que fue quedarse con 10 jugadores, y para el final del partido se hicieron de nueva cuenta del esférico para calmar las ansias de los visitantes, que de nueva cuenta se quedaron con las ganas de marcar, notándose que su máxima figura, el francés André-Pierre Gignac, no se entrega como en el torneo pasado o simplemente ha perdido el tino que lo hacía tan infalible.
Algo pasa con los felinos, pero lo de Puebla ya no es casualidad. Redacción