HOUSTON.— El luchador estadounidense de origen mexicano Caín Velásquez derrotó al brasileño Junior dos Santos en el quinto asalto y retuvo el título de campeón del mundo en la división de los pesos pesados de la UFC (Ultimate Fight Championship).
“Fue una pelea muy dura, fue difícil, una noche dura. Hay que reconocer al rival, es un luchador duro”, dijo Velásquez el sábado por la noche en Houston tras la tercera pelea entre ambos, que sirvió para romper el desempate.
El catarinense Dos Santos había ganado el primer combate en 2011, la única derrota de Velásquez, que se impuso en la pelea de revancha en 2012.
La dureza de los golpes hizo que Dana White, presidente de la UFC, asegurara después que el combate debería haberse detenido en el tercer asalto.
“No creo que Dos Santos tuviera que haber recibido tanto castigo”, dijo White.
El brasileño, acorralado contra la pared del octágono, sufrió sendos cortes en oreja y boca.
“Me ganó, ¿qué más puedo decir? Es un gran luchador”, admitió Dos Santos, resignado.
La UFC es una competencia de lucha con artes marciales mixtas dierentes que está atrayendo a muchos seguidores latinos, especialmente en México.
