Renton .—El esquinero de los Seahawks de Seattle, Richard Sherman, dijo ayer que fue el quarterback de Nueva Inglaterra, Tom Brady, quien inició la guerra de declaraciones entre ambos durante un encuentro de temporada regular en 2012 en el que Sherman se acercó al jugador de los Patriots luego de vencerlos 24-23 y le preguntó ¿Estás enojado hermano?.
“Básicamente estaba diciendo que éramos unos don nadie”, afirmó Sherman sobre Brady. “Y que debíamos ir con él después de que nos ganaran. Se la pasó diciendo cosas parecidas a eso durante todo el partido. ¿Qué esperaba? que lo tomáramos muy bien y que le pidiéramos su autógrafo?”
En ese partido, realizado el 14 de octubre de 2012 en el CenturyLink Field, los Seahawks perdían 23-10, pero Seattle anotó dos touchdowns en el último periodo, incluyendo una espiral de 46 yardas de Russell Wilson a Sidney Rice con 1:18 por jugar.
El comentario de Sherman a Brady se vio en televisión nacional en Estados Unidos cuando acabó el juego.
Por su parte, Brady dijo el pasado lunes que no recordaba las palabras exactas de Sherman.
“Para ser honesto en ese momento lo único que pensaba decirle era ‘buen partido’. Es todo lo que pensaba”, afirmó Brady a la radiodifusora WEEI de Boston. “Había mucho ruido después del partido, así que realmente no escuché lo que me comentó. Después me fui al vestuario al terminar el encuentro... él dice que yo estaba hablando de más, lo cual me sorprende”.
Sherman afirmó ayer que la imagen de Brady no necesariamente es un reflejo de la realidad.
“Creo que la gente tiene una imagen distorsionada de Tom Brady”, afirmó Sherman. “Piensan que es un tipo limpio que siempre hace las cosas correctas y que nunca dice nada malo a nadie. Nosotros sabemos otras cosa.
“En ese momento cuando era él mismo, dijo cosas y nosotros le devolvimos el favor. Desafortunadamente, aparentemente no lo recuerda. Estoy seguro de que cuando le está gritando a los oficiales sólo les está diciendo ‘buen trabajo, sigue así”, ironizó.
Sherman dijo que no sabe si Brady buscará atacar su lado del campo en el Super Bowl.
“No me importa”, dijo Sherman. “Espero que sí. Me dará oportunidad de quedarme el balón”.