CANCÚN.— El drama del descenso se puso al rojo vivo. Por increíble que parezca, el Puebla sólo necesitaba un punto para asegurar su permanencia en la Primera División, pero el equipo de Manuel Lapuente acumuló su segunda derrota consecutiva y sexto partido sin ganar, al caer 2-0 con el Atlante en el estadio Andrés Quintana Roo, suficiente para mantener con vida al Querétaro por una semana más.
Sí, en el último encuentro de la jornada 15 y antepenúltima del Clausura 2013, los Potros se aferraron a un par de dianas de Esteban Paredes para levantar su segunda victoria en fila que les da oxígeno en el tema porcentual de cara al próximo campeonato, al tiempo que involucraron al cuadro de La Franja en serios problemas, a pesar de que únicamente les hacía falta empatar para amarrar la estadía en el máximo circuito.
El equipo de Lapuente ofreció un concierto de errores ofensivos y defensivos que ayudaron a la victoria azulgrana, con todo y que los poblanos merecían incluso adjudicarse la victoria, al hacer mucho más por el éxito que los atlantistas.
Primero, al minuto 11, un cabezazo flotado, que no llevaba nada, fue mal medido por El Mostro Álvarez, quien permitió que esférico se le escurriera y el rebote bastó para que anotara el chileno Esteban Paredes.
La reaparición de Alexandro Álvarez le jugó mal a La Franja, porque a partir de ese error, abrió las puertas del triunfo al Atlante, que tuvo mucha suerte para adjudicarse el triunfo, debido a las múltiples fallas de los atacantes poblanos. Una de ellas al minuto 28, cuando Paúl Uscanga salvó sobre la línea un remate de gol y después El Venado Alberto Medina sacudió el travesaño para desperdiciar la ocasión de empatar.
El tema es que no fue la única. El Puebla dominó ampliamente y tuvo varias oportunidades. Por ejemplo, al minuto 62, Diego de Buen llegó de frente a la portería y conectó un bombazo cruzado que venció a Villalpando, pero el esférico sacudió el poste derecho de su portería, cuando todo mundo cantaba la anotación.
El arbitraje también tuvo su participación en este encuentro. Al minuto 79, Diego Jiménez recibió una clara zancadilla dentro del área, pero el silbante Roberto García Orozco dejó correr cuando existía un clarísimo penalti a favor del Atlante.
Instantes más tarde, el Puebla volvió a tener el empate en sus manos, sólo que el zurdazo de Matías Alustiza pasó a un ladito de la portería.
Para poner más dramática la cosa, al minuto 83 se generó un tira-tira en el área atlantista, luego de un centro de Damarcus Beasley que no logró resolver Félix Borja.
Hasta que por fin, al 88’, en el cobro de un tiro de esquina, nuevamente el chileno Paredes ganó el brinco dentro del área y su testarazo superó al Mostro, para dejar a los Gallos Blancos aún con vida a falta de dos jornadas para la conclusión del campeonato de Clausura 2013.
