Hegemónico, histórico, glorioso, esas son las características a las que aspira el América y que Miguel Layún anhela se cumplan. Para lograrlo, promueve una larga estancia de Miguel Herrera en el banquillo azulcrema.
“Lo que aspiramos es a grandes cosas, a hacer historia”, dice un transformado Layún, quien de ser el hazmerreír durante la crisis milloneta, hoy presume vistosos blasones incrustados en el escudo de las Águilas. “Hemos empezado con el título conseguido, con la manera de arrancar el torneo, que es importante, porque el equipo no se ha relajado. Nadie está tranquilo ni conforme con lo que se obtuvo, sino más bien estamos ocupados trabajando para seguir mejorando y para marcar historia”.
Lo ideal, añade, “es tratar de ser el equipo que más puntos sume a lo largo del año futbolístico, hablando de los dos torneos, que siempre nos mantengamos en la parte alta y siempre meternos a la Liguilla, aspirando al título, como se ha venido haciendo, con dos semifinales, un campeonato y estamos con la firme idea de buscar el bicampeonato”.
Sin embargo, para conservar esa inercia, Layún cree que es vital una larga estadía del Piojo. “Yo creo que sí, yo sí lo veo bastantes años aquí en el club, ¿por qué?, lo ha demostrado. Llegó hace un año y medio o un poco más, y el equipo afortunadamente se encontró muy rápido con el estilo de juego que él quería. A la gente le agrada, los resultados se están dando, eso también es importante. Creo que él ha hecho un trabajo muy importante con todos, nos dio confianza a muchos, que la necesitábamos, apoyó a otros y eso, aunado a la gente que se fue sumando durante este tiempo, él supo manejar bien las cosas y nosotros tratamos de llevar al cabo de la mejor manera lo que él busca”.
En esa línea, Layún reconoce que Herrera ha sido muy importante en su crecimiento profesional: “Creo que ha sido un técnico que me ha ayudado mucho, en muchas situaciones. Lo tuve en Veracruz, jugué prácticamente todos los minutos con él y me mostró la confianza para estar en un torneo en el que nos jugábamos el descenso y era complicado”.
Agradecido con el estratega amarillo, resalta: “Hoy me encuentro de nuevo a Miguel, en una circunstancia diferente, donde tenía muchas cosas en contra, muchas adversidades, y de la mano de lo que él busca dentro del terreno, encontré un voto de confianza que me ayudó a desarrollarme. Sí, lo considero un técnico muy importante en mi carrera”.
Sin embargo, lucha para conservar la humildad: “No me creo titular indiscutible ni me siento indispensable ni nada”, asegura resuelto. “Soy un compañero más, que procura estar listo para cuando se necesite”.
