Ricardo Ferretti es un hombre gruñón que no permitirá que federativo alguno, así se llame Decio de María, se meta en sus decisiones cuando tome las riendas del Tricolor.
Octavio Rivas, psicólogo deportivo y amigo de ‘Tuca’, asegura que el respeto a su labor en la cancha es una de las condiciones que el entrenador de origen brasileño puso para aceptar el interinato en la Selección Nacional.
De lo contrario, no hubiese accedido a entrenar al combinado nacional, gratis, y por cuatro partidos, uno de estos ante Estados Unidos por el pase a la Copa Confederaciones 2017.
—Decía que nunca iba a aceptar ser seleccionador de México, que prefería ser barrendero...
—La verdad es una noticia que sorprende bastante. Dijo por mucho tiempo que no aceptaría entrarle por ningún motivo a eso [Selección], por las actitudes de la gente de pantalón largo.
Pero... ¿Cuáles eran esas actitudes?
Rivas explica que los dirigentes de la Federación Mexicana de Futbol suelen entrometerse con el trabajo de los seleccionadores, aunque ahora escucharon las peticiones de Ferretti y accedieron.
“Yo creo que le hicieron caso a las condiciones que él pidió para trabajar. Me dio gusto por él; le voy a mandar un mensaje para felicitarlo”, señala.
Y recuerda que en el pasado “[los directivos] querían imponer sus decisiones, muchas veces sin que tuvieran la mínima idea de lo que es un equipo de futbol, pero como eran las autoridades, él decía que ‘a mí no me hacen eso’. Esta vez lo deben de haber escuchado para que no se metieran en sus decisiones. Y como se las aceptaron, él aceptó.
Ferretti tendrá la responsabilidad de guiar a la Selección de México a sortear la crisis en la que está inserta, desde el despido de Miguel Herrera, el 28 de julio pasado.
El psicólogo Rivas le augura éxito al entrenador de Tigres en esa empresa, porque “pienso que sí tiene la capacidad para lograrlo, siempre y cuando la gente de arriba no le ponga obstáculos, como empezar a tomar decisiones que tengan que ver con el equipo como tal, sin que ellos tengan el conocimiento pleno”.
El ‘Tuca’ se encuentra en una etapa en la que luce cómodo en el banquillo de los felinos del norte. Su experiencia de 24 años como entrenador y la cosecha de tres títulos del máximo circuito [Guadalajara, Pumas y Tigres] le han dado prestigio en el futbol mexicano.
Parecería que para el brasileño hay poco que ganar, cuando percibe un sueldo de 1.2 millones de dólares en el conjunto regiomontano.
Rivas cree lo contrario, que es un reto que a Ferretti le viene bien, por más experiencia que haya acumulado durante su trayectoria.
“Yo creo que sí [es un buen reto], porque más allá de los resultados, lo que él haga, va a ser observable, como el trato con los jugadores y la prensa. Aún tiene mucho que ganar”, considera.
—Doctor Rivas, ¿usted cree que se quede ‘Tuca’ en el Tri?
—Tiene que ver cómo reaccionan los de pantalón largo. Si ve que le cubren todo lo que él diga, seguramente aceptará continuar. Si no, les va a decir “hasta aquí llegué y que les vaya bien”.