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Ya no basta con ganar peleas. Tampoco hacerlo ante una televisora. Hoy en día los boxeadores necesitan trabajar su imagen pública. Ocuparse por tener exposición y darse a conocer lo más que se pueda para que más personas asistan a sus funciones y sus bolsas puedan mejorar. Un trabajo paralelo al de gimnasio tan arduo como el entrenamiento diario.
Bajo esa premisa, la campeona interina gallo del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Jessica González, dedica gran parte de su agenda diaria para ofrecer entrevistas y tener la mayor presencia en medios.
“Es muy importante darte a conocer y que la gente te ubique, porque así, a la hora de las peleas, más gente te irá a ver. Tal es el caso de Mariana Juárez o Ana María Torres. Ellas son las que congregan a más personas en sus peleas y, creo que eso les ayuda a que puedan cobrar más”, comparte González, en charla con EL UNIVERSAL.
En el caso de la monarca gallo del CMB, ha buscado canalizar ese interés que generó en el medio boxístico tras vencer a dos campeonas mundiales de otros organismos, como lo eran Irma Torbellino García y Yazmín Rusita Rivas. Pero no todos los boxeadores tienen el mismo interés.
“En general a muchos [boxeadores] les falta trabajar la imagen, pero estoy consciente de que esto también va de la mano con qué tan bueno seas como boxeador. Jhonny [González], Mariana y Ana María son grandes peleadores y creo que ellos llaman mucho la atención por sus grandes peleas”, reflexiona.
Además, a través de su propio trabajo de imagen pública, la campeona gallo quiere demostrar que hay boxeadoras preparadas académicamente, como es su caso —con una licenciatura en administración de empresas— y acabar con varios estereotipos más que rodean en la idea de cómo son las pugilistas.
“Es importante buscar exposición en medios, porque las personas piensan que las boxeadoras somos machorras, parecidas a los hombres, y a mí me gusta que la gente tenga una imagen diferente de nosotras. Que vean que podemos cuidar nuestra imagen, que hablamos bien en medios. Me gusta romper los paradigmas que tiene la gente”, agrega González.
Dentro de este trabajo de medios que realiza Jessica, tuvo la iniciativa de realizar un calendario, con la intención de captar más seguidores. Para ello, estuvo en una sesión de cinco horas en la que realizó varios cambios de ropa; una situación a la que no está acostumbrada en su carrera como boxeadora.
“Hacer un calendario representa un esfuerzo, porque nosotros vemos a las modelos que van y posan y yo no tenía idea de que era tan cansado estar sonriendo ante una cámara, el hacer poses diferentes, el que te pidan ponerte de cierta manera. Así que eso fue lo que más trabajo me dio, el romper el hielo y empezar a hacer posiciones más naturales”, confiesa González, en un esfuerzo más por trabajar una mejor imagen pública.