Cruz Azul tiene su prueba de fuego este día, cuando reciba ni más ni menos que al líder de la competencia, los invictos Tigres de la UANL.

Y es que La Máquina ya no puede darse el lujo de perder más factores que lo frenen en este torneo:

Perdió a Javier Aquino y su sistema ofensivo se desequilibró.

Perdió su solidez defensiva, tan halagada el torneo anterior.

Y acaba de perder, ante Pachuca, su primer partido del torneo.

Lo único que le queda ahora es defender su localía, la cual lo ha hecho fuerte desde que Guillermo Vázquez llegó al mando del equipo cementero. Con Memo al mando, los azules no han perdido en trece juegos realizados en su estadio.

Pero ahora viene Tigres; el invicto; el del “maestro” de Guillermo Vázquez: Ricardo Ferretti, el Tigres que trae en sus filas al último campeón de goleo que tuvo el equipo: El Tito, un tal Emanuel Villa.

“Sí, es una buena prueba jugar contra Tigres, veremos de qué estamos hechos”, dice el técnico Guillermo Vázquez, que el torneo anterior perdió el invicto precisamente ante los norteños por 2-0.

La crisis en que entra Cruz Azul, podría agudizarse si hay un mal resultado, mas, si el equipo logra salir avante, ésta podría quedar en el olvido. “El resultado a favor sería el revulsivo que necesitamos —agrega el técnico cementero—. Es una gran prueba para nosotros, jugar contra un equipo que viene tan bien”.

Maestro regañón

“Sí, le he aprendido algo”, a Ricardo Ferretti, ha confesado Memo Vázquez en distintas ocasiones.

Mas parece que no ha sido demasiado, ya que en los enfrentamientos directos, El Tuca le saca clara ventaja a Vázquez Junior.

El primer juego fue en el Clausura 2006. Memo había entrado como interino a Pumas y se enfrentó contra los Tigres de Tuca, en su segunda etapa, y empataron a un gol. A partir del Apertura 2010, se volvieron a dar los duelos y la ventaja es para Ferretti con cuatro victorias, por una derrota.

Viene “El Tito”

Ingrediente aparte será la vuelta al estadio Azul de uno de los últimos estandartes de la institución.

Emanuel Villa lo dejó en claro, no quería salir de Cruz Azul, pero las políticas de la directiva de no renovarle por más de un año a jugadores mayores de 30 años, lo dejó fuera.

“Hoy es uno de los días más tristes de mi vida. Nunca pensé que este día iba a llegar”, escribió Villa en las redes sociales, cuando se dio su salida.

Ahora regresa y no tiene claro si celebrará o no, en caso de marcar.

“No sé —duda El Tito en su respuesta, para luego tomar aire e intentar contestar de nueva cuenta—. No sé qué vaya a pasar, que vaya a hacer. Pero más allá de que celebre o no, de que grite un gol o no, que quede claro que siempre lo haré con respeto a un equipo que me dio mucho, como yo traté de darle”.

Además del sentimiento que habrá por jugar contra Cruz Azul, Villa dedicará el juego a su tío, recientemente fallecido en su natal Argentina.

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