Apretó el acelerador 15 minutos, los suficientes para salir avante de su primer partido en la Liga de Campeones de la Concacaf, al derrotar 3-0 al Herediano de Costa Rica.
Del minuto 31 al 45 de la primera parte, La Máquina lució como tal, aprovechando los errores de un cuadro tico que apenas opuso resistencia en la segunda mitad, cuando los Cementeros ya habían sacado a sus tres hombres importantes: Joao Rojas, Gerardo Torrado y Christian Giménez.
Los goles fueron obra de Jaír Pereira (31’), Mariano Pavone (41’) y Gerardo Torrado (45’). Con este triunfo, Cruz Azul acumula sus primeros tres puntos en el torneo y empata al cuadro centroamericano, que ya venció 6-1 al Valencia de Haití, el otro cuadro que completa el grupo.
El primer tiempo fue ríspido hasta que Cruz Azul le puso futbol. Memo Vázquez tomó en serio el torneo, como lo había anunciado y metió a sus mejores hombres. No importó que Rojas dijera que está cansado, que Chaco y Torrado vinieran de tres juegos seguidos (dos de Liga y uno de Selección), o que Pavone estuviera peleado con el gol.
Además, el juego fue propicio para reivindicarse.
El primer gol fue de Pereira, quien así pagó su expulsión del juego de Liga ante el Atlante.
El segundo de Pavone, quien con ello se quitó la malaria de tres juegos sin anotar.
Y el tercero de Torrado, quien no acostumbra meter el balón a las redes contrarias.
Otra vez destacó Rojas. El ecuatoriano es un cuchillo que corta y recorta a todo defensa que se le atraviesa. De sus pies nacen las jugadas de mayor peligro cementero, aunque sigue sin encontrar el tino exacto a la hora del último pase, para generar aún mayor daño a los rivales.