En esta fase final sólo entraron dos clubes llamados “grandes”: Cruz Azul y América. Los equipos que les toque enfrentarlos, son los que tendrán mayores entradas.
“Los grandes saben medirse en cuestión de aumentos en taquilla. Entienden hasta dónde pueden estirar la liga [el presupuesto de su afición]”, afirma Luis Ramón Carazo, experto en economía en los deportes.
Pero a los equipos a los que les toca recibir a los llamados “grandes” les cae de perlas.
“Toluca, que es de los clubes que no llenan su estadio. Contra Cruz Azul, el Nemesio Diez estará a tope, pero el Azul posiblemente no esté lleno en la vuelta”.
En el caso de América, que recibe a Tigres, “el caso será diferente. Lo que pasa con los equipos del norte es atípico. Tigres, Monterrey, Santos y Tijuana tienen sus estadios casi llenos todo el torneo, e implementan un sistema de abonos que te permite entrar a los juegos de la temporada regular y te da derecho de comprar tu boleto a un precio más accesible en la Liguilla”.
América, posiblemente, “no tendrá una gran entrada. Podría darse si la afición de Tigres invade como lo hicieron en San Luis, pero ojalá que no les cobren de más por ser visitantes, eso sería total discriminación”.
A las Águilas, “todo esto que se vivió con la Selección les afectará positivamente. Al América, claro que le va a costar trabajo llenar el estadio, al menos que sea la final, pero como ahora sus aficionados creen que nos llevaron al Mundial, habrá mucha más atención”.
Al final, en un país en crisis, “muy amolado, los que ponemos los precios son los aficionados, porque ellos sabrán si van o no”.
