GUADALAJARA.— Siente que el trato no es igual. A Nicolás Bertolo y a Paulo da Silva se les retiró el castigo con la revisión del video. Pero a Miguel Sabah ni siquiera le redujeron la sanción de dos partidos. Hoy, el delantero del Guadalajara está de regreso, luego de pagar la sanción. Pero persiste en él, la molestia tras sufrir un nuevo incidente con la Disciplinaria.
El goleador aparece en la sala de prensa con toda su experiencia a cuestas. Medita las palabras, pero por más que lo intenta, aparece inevitablemente la desagradable sensación de sentir que no recibe el mismo trato que otros futbolistas.
“Te lo digo por experiencia, porque me ha pasado dos ocasiones anteriores. Fui expulsado injustamente en un América-Cruz Azul, en una bronca donde nunca pego y me dan siete partidos. Después, en la semifinal de Cruz Azul-Morelia, que se armó la bronca, en el video salgo separando y me dan un partido”, recuerda.
“Yo nunca hablo mal de eso, pero creo que hay veces que uno debe mostrar la molestia, porque no es igual. Ellos se basan en video, pero en las imágenes, yo nunca salgo y dices: ‘Bueno, de qué se trata’. Es evidente cada vez más los errores que se cometen en ese tipo de cosas. No queda más que asimilarlo y tener cuidado en esos aspectos”, añade Sabah.
“Se peleó demasiado la vez de Cruz Azul y Morelia, pero creo que después de la bronca, tenía que haber expulsados de los dos equipos y ese fue el pretexto, no había otro. Mostraron videos y aparezco siempre separando gente. Por más que el club pueda alegar y pagar la multa, si no se quieren ver en desventaja al tomar una decisión, vas a salir perjudicado siempre, es parte de esto y como jugadores, no queda más que evitar ese tipo de cosas”, sentencia el atacante.
La molestia es tal, que para Miguel Sabah es cuestionable la revisión de video. “Está complicado, porque si lo ves de una manera para evitar la trampa, sería benéfico, pero sí es muy complicado hablar de ese tema. Hay muchas formas de pensar, en lo personal, creo que se tendría que tomar video para no perjudicar a un equipo, por ejemplo, con un gol que entra y el abanderado no lo ve, porque haces un esfuerzo y un error humano te puede perjudicar. Ahí puede ser, pero en cuanto a las decisiones arbitrales que en ese momento él vio, son respetables”, asevera.
Por lo pronto, el atacante rojiblanco ha tenido que pasar dos semanas alejado de las canchas. “Sentí una amargura enorme. Ante todo vine como refuerzo de experiencia, por eso me queda la amargura, porque yo quiero jugar, vengo a jugar, no a estar viendo los partidos desde la tribuna. Una amargura enorme, desesperación al saber que vienes a entrenar y no puedes estar el fin de semana. También sirve de experiencia”, agrega Sabah.
La expulsión frente a Toluca y la suspensión de dos juegos han dejado secuelas en el futbolista. “Quieras o no, quedas ciscado en ese aspecto. A lo mejor no voy a tener la misma confianza de ir a pelear un balón como siempre, porque por ahí chocamos y me sacan la roja, pues mejor evito eso y entonces voy más tranquilo a pelear la pelota”, concluye.