Phoenix .— El linebacker de los Colts de Indianapolis, D’Qwell Jackson, negó rotundamente ser quien haya dado a conocer que los balones con los que jugó su equipo frente a los Patriots por el cetro de la Conferencia Americana (AFC) estuvieran desinflados.
El jugador, que fue elegido para participar en el Pro Bowl por primera ocasión en su carrera, dijo tras la práctica que sostuvo en un campo de Glendale, Arizona, que no pudo distinguir si el balón que interceptó en el segundo cuarto, de la derrota por 45-7, ante Nueva Inglaterra estaba o no inflado por debajo de lo requerido por la NFL.
“Soy un linebacker, soy un tipo defensivo. Si alguien pudo reconocer algo, definitivamente no sería yo”, expresó Jackson.
Después de interceptar a Tom Brady, Jackson dijo haber entregado el ovoide al personal de equipamiento de los Colts como ‘souvenir’. No sabe lo que sucedió con el balón y lo que se desencadenó después.
Cuando se le preguntó cómo llegó el ovoide a los oficiales de la NFL, Jackson respondió: “Esa es una pregunta que no puedo responder. No sé cómo llegó a ese punto. De algún modo, estoy en medio de todo”.
Jackson, quien no registró intercepción en la temporada regular, dijo no haber pensado que el balón inflado por debajo de lo reglamentario le ayudó a atrapar el pase de Brady.
“En mi opinión, pienso que tengo buenas manos”, dijo Jackson. “Pero no sé si de un modo u otro, un balón desinflado o inflado me ayudaría en ese sentido”.
Jackson piensa que la NFL actuará. Dijo que no le corresponde a él sugerir un castigo —si es que lo hay— contra los Patriots si hicieron trampa.
