Casi ocho meses habían pasado desde la última vez que Alan Pulido marcó gol en un partido oficial. Una vez que se quitó la malaria, el jugador admite que trabajará de manera distinta, porque con esa anotación ha recobrado muchas cosas que había perdido en el camino.
“En lo personal, [me siento] muy contento, me motiva para seguir buscando marcar jornada tras jornada, sabiendo que el torneo pasado estuve ausente por las lesiones. Se logró el primer gol y lo importante es que ayudé a mi equipo. Se recupera confianza en todos los aspectos”, afirmó.
Algo que le agradó mucho al delantero fue el planteamiento que mandó el director técnico, Matías Almeyda, para el cotejo frente al Necaxa, porque el equipo fue más agresivo al salir con Rodolfo Pizarro y Orbelín Pineda en mediocampo, ya que le dio más velocidad al 11 al momento de atacar, así como en la recuperación.
“Creo que la contundencia... Ahora considero que sí lo fuimos. El equipo se planteó un trabajo bueno con Matías. Salimos con más atacantes, fuimos a proponer y gracias a Dios se logró el resultado”, valoró.
Respecto de su lesión, Pulido todavía no sabe si estará en el partido del próximo fin de semana ante el Monterrey. Debe esperar la reacción de su rodilla izquierda. Por lo pronto, realizará trabajos supervisado por el cuerpo médico.
“Sentí una molestia en la rodilla izquierda, aunque espero estar en el encuentro entrante. Sabemos que es un equipo complicado [Monterrey], tiene elementos de gran categoría, pero nosotros trataremos de plantear un partido bueno para continuar con buena racha”, dijo.
A final de cuentas, el Guadalajara parece haber logrado lo más complicado, que era ganar un partido. Aunado a eso, su referente en el ataque se reencontró con el gol, lo que le permite soñar en que regresará a su mejor nivel.