Datos de la consultora Nielsen indican que, en promedio, los encuentros de la NFL tuvieron 1.6 millones de personas menos, respecto a la campaña de 2016.
Además de Donald Trump, la Liga fue desafiada por los fanáticos que se molestaron al ver las protestas de quienes se arrodillaron en la entonación del himno.
“Queremos que la gente sea respetuosa con el himno nacional y nos aseguramos de que traten este momento de manera respetuosa”, dijo el comisionado de la NFL, Roger Goodell.
“Es algo muy delicado y garantiza que demos opciones a los jugadores, pero creemos que ese momento es algo importante”, aseguró el directivo.
La NFL ahora se une a la NBA para exigir a los jugadores que respeten el himno. Las Grandes Ligas de beisbol y la NHL no tienen políticas que dicten el comportamiento de los jugadores durante el himno, y el año pasado los Athletics se unieron brevemente en los reclamos de rodillas.
Con esta serie de directrices, los propietarios de la NFL trataron de solucionar una polémica que estalló la temporada pasada, cuando miembros de varios equipos de la Liga decidieron poner una rodilla en el suelo durante el himno en señal de protesta, en contra de la violencia policial; movimiento que inició Kaepernick, quien no ha sido contratado desde que salió de los 49ers de San Francisco.
El monto de la multa que impondrá la NFL a los equipos que tengan jugadores que protesten no se dio a conocer.