RECIFE.— Tras lograr un resonante triunfo que clasificó a México a la segunda ronda, el presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Justino Compeán, le dio un fuerte abrazo a Miguel Herrera.
No es para menos.
Después de todo, el Piojo Herrera rescató un barco que parecía hundido, clasificó al equipo a Brasil 2014 y tras apenas seis meses de trabajo, los tiene en la antesala del quinto partido mundialista.
“Primero pienso que Rafa [Márquez] debe levantar la Copa del Mundo y después vendrán los momentos en que tenga que pensar en otras cosas”, dijo Herrera sobre una renovación de contrato. “Por ahora vamos a concentrarnos en el juego contra Holanda”.
El entrenador de los grandes sueños y las grandes promesas está cumpliendo paso a paso con lo que prometió cuando tomó el puesto. Que el quinto partido sea un piso y no un techo.
“No sé si era la persona correcta, pero agradezco a mis directivos, a los 18 dueños de los equipos que me eligieron, lo único que he tratado de demostrar es que quiero trabajar al máximo, con una gran determinación para no fallarles”, añadió.
Hasta ahora va por buen camino, pero para llegar tuvo que sortear unos complicados croatas y en el camino se viene una Holanda que es candidato al título.
“Hoy [ayer] vamos a disfrutar este día, pero con mi grupo ya estaremos en el desglose que es Holanda, vamos a seguir trabajando con la misma intensidad, cuando el equipo muestra el ritmo y la determinación para conseguir los resultados es un equipo fuerte”, dijo Herrera.
