Las mujeres en los últimos tiempos ocupan puestos que anteriormente era impensable y ejemplo de ello es la NASCAR, donde ahora el llamado sexo débil no sólo es el adorno, pues ahora son mecánicas, juezas o spotters.
Karen Nava ingresó a la NASCAR hace ocho años, desempeñandose como spotter en la categoría Stock V6, aunque su sueño es ser piloto de uno de los poderosos autos de carreras, aunque para ello ha tenido que sortear múltiples obstáculos, comenzando con el género.
La falta de confianza de los patrocinadores en una piloto ha frenado su debut en el serial mexicano.
“Desde hace cuatro años estoy queriendo, buscando patrocinadores y no se puede, y no porque eres mujer, pero en algún momento tiene que salir. También he tenido que batallar con las traiciones, pues en alguna ocasión presenté un proyecto, el cual fue plagiado y dado a otro piloto”, dice la joven de 22 años.
Señala que al ser un deporte considerado para hombres es muy complicado que le apuesten a una mujer piloto.
Sin embargo, recuerda que ella corrió con suerte. Entró al equipo de Oscar Torres, quien le abrió las puertas y le dio la oportunidad de subirse a un coche de turismo, donde entrenaba y sorprendió a propios y extraños al hacerlo bien.
Recuerda que en una práctica el auto trompeó y todos pensaron que bajaría llorando del auto, pero para sorpresa de todos siguió corriendo.
También ha tenido que batallar con las traiciones, pues presentó un proyecto, el cual le fue plagiado, para otorgárselo a otro piloto.
Karen, como spotter, se convierte en los ojos de los pilotos y su trabajo es informarles sobre las condiciones prevalentes en la pista y las condiciones técnicas del bólido.
“Estoy de spotter principal en la V6 y en V8 estoy de secundario y siempre he estado con Canel’s. Los mecánicos y otros integrantes del equipo me respetan mucho. Si tú te prestas a que te digan algo no te ven como un cargo mayor, pues al spotter lo tienen que respetar. En mi equipo han estado tres pilotos y se dividen los mecánicos, pero la competencia es contra todos”, explica.
Espera este año competir en dos o tres carreras, a la espera de mayores patrocinios, y confía que lo aprendido estos años como spotter le ayudará a ser más competitiva.