Montevideo.— Carlos Sánchez llegó a las 0:30 horas de hoy al aeropuerto de Carrasco procedente de México, desde donde salió bajo amenazas de muerte por hinchas del Monterrey, furiosos porque partió para incorporarse a la selección de Uruguay antes de las finales que Rayados deben jugar hoy y el sábado ante Pachuca y, peor aún, pese a la comunicación enviada por el club mexicano a la Asociación Uruguaya de Futbol dando cuenta de que con el respaldo de la Federación Mexicana prohibía la salida del país al volante celeste.
La comunicación remitida por el Monterrey “a quien corresponda” de la AUF, con la firma de Luis Miguel Salvador López, presidente deportivo del Monterrey, establece: “Por medio de la presente queremos informar que el Club de Futbol Monterrey Rayados con el respaldo de la Federación Mexicana de Futbol le prohíbe a su jugador Sr. Carlos Andrés Sánchez Arcosa que abandone el país con el fin de que nuestro jugador pueda participar en los partidos de la final del futbol mexicano a celebrarse los días 26 y 29 del presente mes.”
La carta finaliza enfatizando: “Toda vez que consideremos que el jugador tiene el mismo derecho de disputar la final de su torneo oficial al igual que los jugadores registrados en Europa.”
Sánchez, sin embargo, viajó pues debió cumplir con el acuerdo para los jugadores internacionales convocados a la Copa América Centenario.
