Alfredo Talavera, a sus 33 años de edad, sabe que la fama y el dinero puede hacerle daño a las jóvenes promesas del futbol mexicano, si no se les alerta al respecto.
Señala que hay que hablarles de frente y sin rodeos para que los jugadores, quienes muy temprano en su trayectoria profesional ya sienten lo que implica ser un elemento reconocido y bien remunerado, no se pierdan y consigan los objetivos en Río de Janeiro 2016.
“Son chavos [los seleccionados Sub-23], algunos ya fueron campeones, ganan buen dinero, tienen su coche, todo eso puede influir en algún momento negativo. Hay que hablarlo antes para evitar todo eso”, avisa el portero del Toluca en la zona mixta organizada en el Centro de Alto Rendimiento de la Federación Mexicana de Futbol.
Tala explica que los peores enemigos a los que enfrentará el Tri Olímpico en Brasil “somos nosotros mismos”. Argumenta que los pensamientos propios son los que pueden jugar a favor o en contra de la escuadra mexicana.
“La misma energía que tenemos para pensar mal o en negativo, hay que usarlo para lo positivo, en ver qué es lo que se puede mejorar y dar lo mejor de nosotros. Los entrenamientos, la táctica, la puntualidad, es lo que estamos tratanto de mantener bien”, manifiesta el guardameta, quien fungirá como uno de los tres refuerzos mayores del equipo que dirige Raúl Gutiérrez.
Talavera superó su lesión de rodilla que lo tuvo marginado de las concentraciones nacionales previas. Se reporta listo para comenzar a defender el arco mexicano. Promete no tener molestias que lo hagan titubear en la portería que hace cuatro años defendió en Londres 2012, José de Jesús Corona.
“Bien, estoy al 100 por ciento. Entrené la semana pasada y ya me siento bien. Hay que tener paciencia y esperar”, recuerda.
“No quise jugar contra América para recuperarme con todo y la confianza que siempre se necesita. Ya estamos ilusionados de que empiecen estos Juegos Olímpicos”, revela el experimentado portero, listo para ser la muralla mexicana en el torneo olímpico de Río 2016.
Desconocen a Alemania. En la delegación futbolera nacional aún desdeñan a Alemania, con todo y lo que ese país representa en términos de balompié.
Alfredo Talavera justifica que no hayan estudiado a los teutones, porque “el partido más importante es el que sigue”. Y éste es contra Argentina el próximo jueves en el estadio Cuauhtémoc de Puebla.
“Hubo muy poco tiempo para estar todos juntos y tienen que estar todos juntos para conocerlo [al primer contricante del Tri en los Juegos Olímpicos]”, dice.
De inmediato, el portero escarlata reta al combinado europeo: “Nosotros somos más importantes [que los teutones]. Habrá mucho tiempo para poder analizar qué es lo que tiene el rival”.