Son los rostros del Clásico. En esas caras se reflejan lo que viven sus respectivos equipos, la actualidad; lo que gozan, lo que sufren; lo que lloran y lo que ríen.
¿Qué dicen las caras de Matías Almeyda y Miguel Herrera a una semana del juego de juegos, del Clásico Nacional?
“Se ve que uno está sufriendo, que el otro goza; qué uno está disfrutando su trabajo y el otro no tanto”, explica Miriam Cervantes, coach en comunicación facial y lenguaje no verbal.
Cervantes, con experiencia de casi 10 años en el análisis facial, afirma que en el rostro de ambos entrenadores se nota el momento que viven: las Águilas, líderes invictas, y las Chivas, penúltimo lugar de la tabla.
Cuestión de momentos: “El señor Herrera se ha expandido. Es un tipo que une al grupo, por la forma en que ha unido su cuello con el rostro por la papada que ahora tiene. Busca la unión, busca siempre conciliar y le gusta oír opiniones”.
Del argentino Almeyda, expresa la experta: “Genera el liderazgo por imposición... Le cuesta trabajo hacer relaciones estrechas. Es una personalidad mucho más álgida”.
Parece que es claro que la cara es un espejo andante del momento que están pasando:
“El desempeño que tienen en su trabajo se nota claramente en sus expresiones. Herrera es un tipo mucho más sonriente, mucho más expresivo, su forma de interactuar con el equipo es un reflejo de su personalidad. Su forma de festejar los goles, lo que hizo en el Mundial [de Brasil 2014] al festejar los goles, es una muestra de esa unión, sus movimientos, su lenguaje no verbal es claro”.
Matías Almeyda es todo lo contrario, “es un tipo con la personalidad mucho más discreta, con bajo nivel de tolerancia. No es nada expresivo, tiene la cara muy rígida, eso es lo que se ve en las imágenes recientes”, reitera.
Guadalajara y América se enfrentarán el próximo sábado en el estadio Akron, en una edición más del Clásico Nacional.
Las Águilas son el primer lugar de la tabla con 17 puntos, diez más que las Chivas, que se encuentran en el sitio 17, de 18, con tan sólo siete unidades.
Antes de verse las caras en el césped, ambos clubes deberán finiquitar sus series por los octavos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf.
Los azulcrema regresaron de Costa Rica con una ventaja de 5-1 sobre Saprissa. En tanto que el Rebaño derrotó por 2-0 al Cibao de República Dominicana.
En los dos más recientes clásicos, los de Coapa tienen saldo favorable con un empate a un gol en el Clausura 2017 y una victoria, 2-1, en el Apertura 2017.