No fue una determinación exclusiva del director deportivo del Atlas Fabricio Bassa, cesar a Rubén Omar Romano como técnico del Atlas, sino de un análisis de los directivos en el zorro, aseguró el director y la gota que derramó el vaso fue la derrota ante el Veracruz, ya que ese encuentro por el tema de cociente era una obligación ganarlo.
“Si de 30 puntos obtienes siete, y si pierde contra los dos equipos que están peleando contigo el tema del promedio, que agarró en el último lugar al equipo y no lo sacó de ahí, evidente los resultados resuelven cualquier respuesta que dé”.
Bassa precisó que en Atlas no se toma una determinación sino se consulta con los demás dirigentes y así sucedió con Romano, tras la derrota se tuvo que analizar a dónde iban, porque ya antes se había perdido ante otro equipo involucrado en el descenso, Lobos.
“En este caso fue por consenso, que los resultados hablan por sí solos. Hay algo que es insostenible, podemos hablar de la forma, que si está bien que si está mal, pero los resultados hablan por sí solos. Sé que hay técnicos que tienen más prensa que otros pero si de 10 partidos pierdes siete, más dos de la copa MX”.
Siempre, como marca el libro, cuando las cosas no están bien en resultados lo más sencillo es correr al entrenador con su cuerpo técnico, ya que ir contra los jugadores no es viable y así sucedió con Romano.
“Uno puede tener la opinión de la persona del profesional, pero por el otro lado los números son fríos. Se elogia a quien gana, se crítica a quien pierde y generalmente a lo largo de la historia, los que van a seguir saltando son los entrenadores porque es el hilo más fino que se tiene para cambiar”.
El que Bassa haya comenzado charlas con Romano en su momento para contratación de jugadores y pretemporada, entre otras cosas, fue porque se creía en el proyecto del argentino, pero en el momento en que se pierde ante el Veracruz todo se desmoronó.
“Deseo que a Rubén le vaya lo mejor posible como a todo su cuerpo técnico. Vi los sueños que tenían con Atlas, lo profesionales que son y como director deportivo, era la persona con la que planeaba porque era la persona que estaba al cargo. Si no planifico con la persona que está al cargo, quiere decir que no era la persona indicada para continuar, simplemente planifiqué todo lo que se ha venido hacer hasta ahora. Acá hay un consenso y tampoco me saco de que no (determinó), pero tampoco me pongo en primera persona porque hay consenso. El día de mañana igual me lo comunican como se lo comuniqué al entrenador”.
