Roma .— Al menos nueve aficionados del equipo Torino resultaron heridos, uno de ellos de gravedad, por la explosión de un artefacto lanzado al interior del estadio Olímpico de Turín por adversarios de la Juventus.
El incidente se verificó luego de una larga jornada de enfrentamientos entre los seguidores de las dos escuadras que tienen entre ellas una gran rivalidad histórica, que este domingo jugaron en el derbi finalizado dos goles a uno a favor de Torino.
Antes del encuentro, aficionados de ese equipo atacaron un autobús en el que viajaban hinchas de la Juventus, con el resultado de varios vidrios del vehículo rotos pero ningún herido.
Más tarde, ya dentro del estadio, los seguidores de la ‘Vecchia Signora’, como se conoce a la Juventus, volvieron a ser atacados con objetos y respondieron con el lanzamiento de un petardo durante el primer tiempo.
Entre nueve y 12 personas resultaron heridas, ocho de las cuales fueron internadas en el hospital Le Molinette y una más fue llevada en ‘código rojo’, es decir, grave, al nosocomio Mauriziano, dijeron los medios.
Al menos cinco aficionados fueron arrestados, mientras la policía anunció que analizaba varios filmados de la agresión al autobús de la Juventus para proceder a otras detenciones.
“No habrá ninguna clemencia para los enemigos del deporte. Son delincuentes que quieren arruinar una pasión, alejando a las familias de los estadios”, declaró el ministro italiano del Interior, Angelino Alfano.
El técnico juventino, Massimiliano Allegri, dijo lamentar lo sucedido y opinó que en Italia se está todavía “atrás” en evitar la violencia en el deporte. También consideró que ante lo sucedido hoy en el estadio de Turín sería de “locos” llevar a niños a los partidos.
En el juego, Juventus se quedó con las ganas de adjudicarse su cuarto título seguido de la Serie A italiana al sucumbir 2-1.
Después que Andrea Pirlo puso en ventaja a la ‘Juve’ de tiro libre, Matteo Darmian empató y Fabio Quagliarella, ex delantero de la Juve, convirtió el tanto de la victoria.
