Orlando.— Durante mucho tiempo, cada vez que México jugaba contra rivales de la zona, de la Concacaf, la historia, lo marcaban como total favorito. Ahora no es así. El Tricolor se enfrenta a Costa Rica, en el Citrus Bowl, a una selección tica que en estos momentos es la mandona de la Concacaf.
Por 130 puntos, según la clasificación de la FIFA publicada a inicios de mes, Costa Rica es en estos momentos la mejor selección del área. Los centroamericanos acumulan 1,056 puntos, por 926 del equipo nacional mexicano.
Aún así los ticos consideran a México como favorito, y lo dice su mismo técnico, Paulo César Wanchope.
“A ver... Nosotros tuvimos un buen Mundial, eso es verdad, pero aún así no podemos negar que México es el grande de la Concacaf”, atajó.
A nivel mundial, el Tri es el número 23 del ranking, y los costarricenses ocupan el 14. “Muchas veces ustedes hablan de favoritos así porque sí”, ha dicho Miguel Herrera, pero la realidad es que “si en la cancha no se demuestra nada de eso, los números no valen”.
Costa Rica hizo mejor Copa del Mundo, “es verdad”, acepta Wanchope, “pero cuando nosotros hagamos varios ‘buenos’ Mundiales, podremos decir que estamos a la par de México o Estados Unidos. A nosotros lo que nos falta es continuidad, cuando tengamos eso, podremos comparar, mientras, no”.
En cuestión de clasificación, el Tri vive uno de sus peores momentos. Está colocado en su tercera posición más baja desde 1993, año en que se creó el ranking. En 2010, México fue puesto en el lugar 27, en 2008 fue 26, ahora son el 23. Costa Rica vive su mejor momento histórico. Hoy es 14, el año pasado fue 16. Lo mejor que había hecho fue en 2003, cuando se colocó en el sitio 17.
La rivalidad renace entre estos dos equipos, los que hace algunos años protagonizaban el Clásico de Concacaf, hasta que llegó Estados Unidos y le quitó el lugar a los ticos. El primer duelo entre estas dos naciones fue en 1935, México venció 2-0 con goles de Tomás Lozano y Luis ‘Pichojos’ Pérez.
La rivalidad comenzó hasta las eliminatorias al Mundial de Suecia 58. Mexicanos y costarricenses pelearon el pase a la justa ida y vuelta. El primero lo ganó el conjunto azteca por 2-0 con goles de Jaime Belmonte y Ligorio Pérez. En la vuelta empataron a uno, Pérez volvió a anotar por México.
Pero lo que más le ha dolido a los mexicano y disfrutado los ticos es el “Aztecazo”. Aquella negra tarde de 2001, cuando con goles de Rolando Fonseca y Hernán Medford, México perdió la imbatibilidad en eliminatorias jugando en el Coloso de Santa Úrsula. En total, 47 juegos, 26 triunfos para México, 15 empates y sólo seis derrotas.
Costa Rica es favorita por 130 puntos. “Ellos deben tomar esa responsabilidad, pero la otra vez que lo dije se la quitaron —dice Miguel Herrera—. Pero fuera de eso México tiene su exigencia, conscientes de la responsabilidad, la asumimos como tal y por supuesto que tenemos que ganar”.