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La oportunidad le llegó de un día para otro y no la quiere desaprovechar. Al boxeador mexiquense Moisés Fuentes se le presentó la opción de volver a ser campeón del mundo si es que vence al colombiano Luis de la Rosa el 7 de septiembre en una pelea a realizarse en Chiapas, un compromiso que aceptó pese a que sólo tendrá unas cuatro semanas de preparación.
“De esto vivo. Tengo que estar consciente que este es mi trabajo y no tengo que dejar de entrenar. Ahora vamos a sacar la casta. Esta preparación me va a costar más sudor, lágrimas y sangre, pero vamos a ser campeones del mundo otra vez”, destaca Fuentes, en charla con EL UNIVERSAL.
Moi (17-1-1, 8KO) se medirá ante De la Rosa (22-2-1, 12KO) por el título interino minimosca de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), en un combate que hasta hace poco no se tenía contemplado realizar.
“Para una pelea de este tamaño estoy acostumbrado a preparaciones de hasta tres meses. Y ahora, el entrenar un mes, me fuerza a pisar el acelerador porque sí es un poquito arriesgado. Me dijeron que la fecha estaba puesta, me agarraron de emergencia y, por ello, en el gimnasio, me quiero comer a mi rival de un solo bocado”, comparte Moisés.
El pugilista de Ecatepec ya tuvo una primera oportunidad de alcanzar dicho cetro, cuando retó al filipino Donnie Nietes en su propia nación, en marzo pasado. Aquella contienda terminó en un polémico empate, pese a que muchos ya veían como vencedor al mexicano. Es un recuerdo que motiva a Moi para alcanzar dicho fajín de la OMB.
“El empate ante Donnie Nietes me supo a victoria porque toda la gente filipina reconoció la derrota de su peleador. En inglés me decían claro que yo era el campeón. Me alzaron a mi en hombros y eso me puso muy contento. Por eso tengo mi corazón alegre tras lo de Filipinas pese al resultado de empate. Sé que gané esa pelea”, resalta.
De vencer al colombiano, Fuentes tiene la palabra de su promotora Zanfer para volver a enfrentar a Nietes. Incluso, le manejan la posibilidad de que se realice la pelea en noviembre. Por ello, se compromete a salir avante en su próxima pelea pese al poco tiempo que le dieron de preparación.
“Con Luis de la Rosa ya tenía dos o tres años que pedía enfrentarlo, pues lo veía como un rival muy duro. Ahora ya se me cruzó en el camino y tengo que quitarlo de ahí porque él me quita muchas oportunidades que vienen. Por eso tengo que ganarle para poder enfrentar a rivales más fuertes”, destaca el pugilista, quien renunció este año a su título paja para subir de división.