Quien ha sentido la entrega de la afición en Querétaro, sabe que es única. Por eso, ahora se vive la locura.

Una emoción desbordada, para poder estar presentes en el juego de vuelta de la final del Clausura 2015, pero para Silvano Téllez, es el momento indicado, ahora que se acerca el 65 aniversario del club.

El máximo goleador en la historia de los Gallos Blancos de Querétaro reconoce que todo se ha conjugado para que por fin un equipo queretano juegue una final en el máximo circuito.

“Es una fiesta de todo Querétaro. Por primera vez un equipo de Primera División llega a la final y es un acontecimiento que todos festejamos. Los aficionados, la gente que acampa para conseguir un boleto, es insólito lo que pasa y quienes participamos para hacer historia con Gallos Blancos estamos contentísimos, felices, deseando que el equipo sea campeón”, aseguró.

Sentado en la sala de su casa, con los reconocimientos que ha recibido por su trayectoria a sus espaldas, Téllez Pacheco recibió a El UNIVERSAL Querétaro, para recordar, volver a sentir y para opinar sobre lo que se vive actualmente en el estado. Él, que durante siete años (1970-1977) jugó en el equipo queretano en la Segunda División profesional y que anotó 300 goles, convirtiéndose en un jugador mítico, que se entregó por completo a los colores y a la camiseta queretana.

“La gente aquí es futbolera, se entrega por completo siempre y cuando hagas las cosas bien, la afición sabe reconocer y siempre está apoyando, y cuando lo logras te conviertes en una personalidad aquí, que eso es lo padre, que te entregues a la gente, que luches por los colores, que pese la playera, cuando se logra eso, tienes toda la entrega de la gente como ahora”.

Solo jugó una final por el ascenso a Primera División, aunque disputó cuatro Liguillas. En su memoria hay momentos inolvidables con sus compañeros y la afición. Como aquel partido contra Cuautla, “peleábamos el liderato, estábamos empatados a un gol y ya faltaban escasos tres minutos para que terminara el partido. En una jugada anterior me dieron un codazo que me abrió la nariz, el doctor Miguel Gutiérrez me decía que no iba a regresar, pero me puso unos vendoletes y me le escapé de las manos, porque Gallos iba a hacer un tiro de esquina.

“El árbitro me permitió entrar y cuando cobraron el tiro iba llegando a la punta del área grande, y me elevé, el portero se voló pero llegué con mucha fuerza y le gané con un cabezazo con todo y me toca meter el gol, se acabó el partido…”, recuerda al tiempo que sus manos tiemblan y su voz se corta un poco.

“Son cosas que se acuerda uno y lo mueven –añade- , me sacaron en hombros mis compañeros y los aficionados, a todos los tengo presente y me regalaron un gallo blanco que ya nunca supe dónde quedó”, rememoró.

El ser parte de los 65 años de Gallos Blancos, significó para Silvano Téllez un momento muy importante en su vida. “Nosotros sembramos algo para que siga continuando todo este ambiente, toda esta alegría de la gente por el futbol, es una sensación padrísima, todo eso lo sienten los jugadores que se convierte en una motivación impresionante.

“Vucetich es el mejor entrenador en México, su llegada fue en el momento preciso, la muestra está en que ya los tiene en la final, con unión y va a confirmar su mote de ‘Rey Midas’, porque va a ser campeón Querétaro”, concluyó.

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